Hasta la más hermosa de las historias tiene un final. La nuestra, la que hemos mantenido ustedes y yo estos ocho años, ha concluido. A veces, el periodismo es una experiencia merecedora de buenos recuerdos.
¡Albricias! Llegó la lotería y se reúnen nuestros dos líderes carismáticos. Y eso es noticia, cuando debería ser lo normal, lo lógico y lo institucional. Lo del perro y el gato y sus cuitas no nos vale. Ambos se deben a los ciudadanos y aunque quieran marcar territorio se equivocan con estos enfrentamientos infantiles. Y el domingo tendremos el discurso del Rey.