ALICANTE. Los hermanos Juan y Pedro Alcaraz, fundadores de la empresa de alquiler de vehículos low cost Goldcar y ahora al frente del family office Aligrupo, siguen de momento sin inquilino para su edificio en La Explanada, el que fuera la antigua sede de la dirección territorial de Bankia en la provincia. Aligrupo se hizo con el inmueble por unos 6 millones de euros en diciembre de 2018, con la intención de alquilarlo al despacho de abogados Garrigues, pero la operación se canceló el pasado otoño.
Un año después de la compra (aunque Bankia salió del inmueble el pasado verano), y sin inquilino a la vista, los Alcaraz han decidido finalmente colgarle al edificio el cartel de 'se alquila', tal como ha podido constatar este diario. A pesar de lo llamativo de esta decisión, fuentes del mercado confirman que existen varios interesados, y que el edificio ha recibido algunas visitas en los últimos meses e incluso ofertas en firme, que por el momento no han fructificado. Entre estos interesados figurarían, según distintas fuentes, tanto grandes patrimonios familiares con intención de rentabilizar el activo como empresas en busca de oficinas en el paseo litoral de la capital.
El edificio cuenta con tres alturas y planta baja que tienen fachada tanto a La Explanada como a la posterior calle de San Fernando. Si bien originalmente se trataba de un edificio de viviendas y podría volver a recuperar ese destino, tanto los Alcaraz como los potenciales interesados en alquilarlo siempre han contemplado mantener el actual uso de oficinas.
Mientras siguen buscando inquilino, los Alcaraz han puesto en marcha la reforma de la fachada para adecentar el edificio. Según han confirmado fuentes municipales, Aligrupo solicitó una licencia de obra para la carpintería exterior, o lo que es lo mismo, ventanales y balcones. Los trabajos comenzaron hace unos días, tras una pequeña reforma que se llevó a cabo en el interior del inmueble el pasado verano, tal como contó este periódico.
A los pocos meses de cerrar la venta del inmueble, Bankia trasladó su centro de empresas y oficina de banca privada al edificio Kronos (en el cruce entre la avenida Catedrático Soler y Óscar Esplá), después de trasladar su dirección territorial a Murcia (al unificar la provincia con la Región vecina tras la absorción de BMN). Inicialmente, Garrigues iba a instalarse en el inmueble el pasado verano, pero finalmente la negociación se rompió porque la oficina no terminó de convencer a la responsable de Garrigues en Madrid que se desplazó a Alicante para visitarlo antes de la firma.
La ruptura del acuerdo resulta especialmente llamativa si se tiene en cuenta que los Alcaraz pujaron por el edificio de la mano de Garrigues, que tal como desveló este periódico visitó el inmueble en la fase de ofertas no vinculantes y 'buscó' un inversor para convertirse en su inquilino. Finalmente, según las fuentes consultadas, el inmueble podría terminar convirtiéndose en la sede de otro despacho o de una de las empresas que se ha interesado por alquilarlo. Mientras, Garrigues sigue buscando un emplazamiento alternativo.