ALICANTE. Alcance o no su objetivo, la cuestión es que la ofensiva del PSPV-PSOE por alcanzar un acuerdo con Ciudadanos tanto en el Ayuntamiento de Alicante como en la Diputación Provincial ha comenzado a generar cambios. Y trascendentes. El actual presidente de la Diputación, César Sánchez, ha anunciado este martes que no repetirá en un nuevo mandato, lo que muy a las claras viene a decir que la dirección nacional anunciará en breve que su candidato será Carlos Mazón, actual número dos de la lista del PP en Alicante capital y hombre avalado por Teodoro García-Egea. Su nombramiento ya tiene el placet de la dirección de Alicante y de la Comunitat Valenciana.
Sánchez ha esgrimido nuevas responsabilidades en el Congreso de los Diputados para justificar la decisión, pero en el fondo hay un contexto de negociaciones, y en las que el PP ve necesario poner el nombre de Mazón sobre la mesa antes de que Cs y los socialistas cierren cualquier tipo de acuerdo, bien sea para la Diputación, o para el propio consistorio de Alicante, que pasaría, según lo publicado, porque la candidata naranja, Mari Carmen Sánchez, se convierta en la futura alcaldesa.
Esta decisión estaba previsto tomarse después del 15 de junio, una vez constituidos los ayuntamientos, pero el ofrecimiento de Puig a Ciudadanos ha disparado las alarmas. El PP ha tenido que mover ficha con Carlos Mazón, aunque su elección no acaba de sentar bien más allá del partido judicial de Alicante. Pero tanto la dirección provincial como la regional la han tenido que aceptar.
Es más, hasta el lunes, además del nombre de Mazón y del propio Sánchez, todavía no descartado, estaba la posibilidad de que los propios casadistas de la provincia de Alicante elevaron algún nombre que generara más consenso entre los nuevos alcaldes y concejales. Incluso la opción de César Sánchez, avalada por Císcar no se veía con malos ojos, no en vano el actual presidente de la Diputación está considerado un hombre de confianza de Pablo Casado.
Pero las circunstancias lo han acelerado todo. Mazón es amigo personal de Teodoro García Egea, que es su principal veledor. Ya fue diputado concejal por Catral y diputado de Obras durante el mandato de José Joaquín Ripoll. Actualmente, es el director gerente de la Cámara de Comercio de Alicante. Fue incluido en la lista del PP de Alicante, con el consenso del actual alcalde y candidato a la reelección Luis Barcala, hoy en día considerado como el principal aliado de Génova en Alicante. Desde este martes cuenta con el visto bueno del propio Sánchez, de Císcar y se supone que de Isabel Bonig. "Sería un "grandísimo" candidato", ha dicho César Sánchez. "Le corresponde al partido asumir esa tarea de propuesta, pero si me pregunta mi opinión, creo que es un gran candidato para presidir la Diputación y si el partido lo estima, va a contar con mi apoyo", ha insistido ante la mirada de Císcar y de su actual equipo. De momento, Sánchez seguirá como presidente hasta mediados de julio, cuando tome posesión su sucesor, surgido de las elecciones del 26M. No recogerá el acta como concejal electo en el ayuntamiento de Llíber, donde ocupó el tercer puesto de la lista en las elecciones del pasado domingo.
El PP ya tiene una silla vacía y un pretendiente. Falta que todo eso encaje con Ciudadanos, a no ser que el recuento de votos deshaga el empate a 14 diputados que lo ha acelerado todo. La guerra por la Diputación de Alicante sigue abierta.
El PSPV esgrime el pasado zaplanista de Mazón (PP) para convencer a Cs del pacto en Alicante