Díez junto a Marina González y Felip Sànchez / Foto: Pepe OlivaresELCHE. No ha habido sorpresas en Compromís per Elx. Esther Díez, candidata de Iniciativa, será la alcaldable de la formación para los comicios de mayo de 2023. En unas primarias que han levantado tanta expectación —3.375 personas— como empeño por parte de ambas partes a la hora de buscar votos hasta de debajo de las piedras como quien dice, finalmente se ha impuesto la que a priori era la posibilidad más previsible: la actual edil y portavoz de grupo de los socios minoritarios del bipartito. Además de ser la candidatura que han apoyado los Mollà, que a pesar de su pérdida de influencia en el interno de la organización, no ha sido así en la ciudad. La jornada se ha desarrollado con normalidad, sin mucha gente votando presencialmente, con una notable participación de 2.718 votos (el 80,53%) y 33 nulos, cuando habitualmente suele votar la mitad. Una muestra de la expectación en la izquierda local por todo lo que hay en juego en clave de proyectos.
En cualquier caso, días de telefonazos, actos, difusión de vídeos y propuestas por parte de las dos aspirantes y sus equipos. Aunque en el lado de la candidata de Més, Marian Campello, a quien no se puede calificar de outsider, porque es una persona conocida entre los movimientos sociales locales, además de actual secretaria autonómica de Innovación y exdiputada en Les Corts, no ha sido suficiente para superar en votos a la línea continuista de Iniciativa, que prioriza seguir con la agenda urbana y 'verde' de estos últimos años. Su proyecto, más nítidamente centrado y defendido en torno a la confluencia con otras formaciones de izquierdas, ha obtenido 1.033 votos (el 38,01%) frente a los 1.652 de Esther Díez (el 60,78%).
Asimismo, Felip Sànchez ha sido el más votado en el cuerpo de lista (1.160 votos), por lo que será el número 3 de la lista, como buscaba Iniciativa, ya que Campello, por el acuerdo de reparto de los dos puestos de salida para las dos ramas, será la número 2. Se cumple el tícket electoral de Díez y Campello. Solo que con un largo proceso de primarias y campaña de por medio. Detrás de Sànchez han obtenido más votos Marina González y Esther Bravo. En cualquier caso, una de las grandes incógnitas será si Compromís logra rebasar los dos ediles —en algún sector del PSOE no las ven todas consigo, y son los potenciales socios para gobernar—. Además, en las coaliciones, aunque no siempre, el socio minoritario suele salir peor parado. Si finalmente salen Díez y Campello, serán dos perfiles complementarios, el primero como se ha visto defendiendo más el aval de su gestión, y el segundo, con un pie más puesto en colectivos y movimientos sociales. Al menos sobre el papel. Todo lo que sea lograr el tercer concejal, en un escenario que estará muy disputado en 2023, será un éxito.
Un proceso que durante estas semanas ha intentado mantener de puertas hacia afuera una evidente muestra de normalidad dentro de la competición, no ha estado exento de recados e indirectas en actos de sendas candidatas, además de constantes runrunes sobre el procedimiento de las primarias, desde telefonazos a potenciales aliados de los otros, hasta teorías sobre la procedencia de algunos registros para votar. En definitivas cuentas, un proceso que inevitablemente ha erosionado a nivel interno, con el caso de Aitana Mas como claro exponente, aunque por otra parte también se defendía a nivel local que podía servir para 'tensar' a la organización de cara a las elecciones, al tiempo que servía de una suerte de precampaña por la difusión de estos días.
En una campaña en la que se han apuntado militantes del PSOE, de Podemos y adláteres, así como asesores de la corporación, finalmente el número 1 de la lista irá para Esther Díez, quien ya había advertido que no aceptaría ocupar el segundo puesto, y el 2 para Campello, que ha centrado el tiro en sus propuestas municipales para las aparadoras. No una apuesta a una carta, porque ha habido un mensajes en otras direcciones ("acelerar" las políticas y más cercanía con movimientos sociales y otros partidos), pero que en líneas generales se ha percibido así. Ahí estaba por ejemplo la presencia hace unos días en Elche de Joan Baldoví, diputado en el Parlamento y candidato autonómico a presidir el Cap i Casal.
Toda vez que ya están definidos los dos primeros puestos de salida, el tercero ha ido a parar para Felip Sànchez, segundo de mando en el grupo municipal, a quien Díez quería garantizar el número 3 de la lista. Uno de los motivos, entre otros, que evitó un pacto hace meses, ya que Més planteaba ese 3 para algún miembro de la confluencia. Ahora que el proceso ha finalizado, hay una pregunta clara: y ahora, ¿qué? La candidata de Iniciativa deslizaba días atrás, aunque no se ha hecho formalmente, que se podría plantear un 4 o 5 puesto para esas confluencias, y que salvo sorpresa mayúscula no son de salida (lo máximo logrado por Compromís fueron 4 ediles en 2015). En el caso de que se explore esa opción, quedará por ver si Podemos-Esquerra Unida-Alternativa Republicana están por la labor, ya que tenían sus esperanzas depositadas en Campello para poder concentrar el voto (con el número 3), o si se presentarán a los comicios con la incógnita de siempre: si la dispersión del voto de la izquierda les volverá a penalizar quedando fuera del Ayuntamiento. Ahora tanto ellos como EU, quienes nuclean este acuerdo a tres, tienen menor base social que hace cuatro y ocho años.
En la parte socialista, que también ha mirado este proceso con sumo interés, como el resto de la izquierda local, respirarán con más tranquilidad, pues no han ocultado sus preferencias por Díez, con quien llevan trabajando 8 años. A Campello la han identificado como poco menos que una candidata de Podemos, y por tanto un posible vector que les podía hacer un camino de coalición, en el caso de ganar, más 'tortuoso', sea por presionar más hacia la izquierda, o por el propio carácter de Campello, que puede ser más impetuoso, como el de la exconsellera y exconcejal Mireia Mollà. Por su parte, su padre, Pasqual Mollà, también se dejó ver estos días en el homenaje al histórico sindicalista de CCOO José Plaza Titos, al que acudieron también los candidatos de Iniciativa (no así del equipo de Més). En resumidas cuentas, un camino que ha finalizado ahora para enfocar siguientes hitos de cara al más importante: los comicios del 28 de mayo.
