ELCHE. Después de los socavones que se detectaron en enero en el barrio de Porfirio Pascual y que preocupan a los vecinos por las lluvias recientes, este viernes empiezan los estudios geotécnicos en la ladera, aunque este jueves ya se han hecho algunos trabajos previos. Paralelamente, este miércoles el alcalde Carlos González y varios concejales recibieron a la plataforma que se ha creado en la zona, de las calles Clara Campoamor, Francisco Miller Giner, y también de Olegario Domarco Seller, para informarse de estas y otras actuaciones como la de la futura pasarela y regeneración en la fachada Este, de la que aún se muestran reticentes.
En este sentido, aunque el equipo de gobierno ya había anunciado que se van a realizar 13 sondeos en la ladera del río para conocer el motivo de los socavones y posibles actuaciones, los vecinos de la zona querían conocer de primera mano qué se va a realizar y actuaciones concretas, planteándose incluso movilizaciones por su inquietud. Finalmente, en la reunión de este miércoles se les ha dado traslado: el viernes empiezan los sondeos geotécnicos, que tendrán una duración aproximada de dos semanas. A finales de abril, aunque la empresa no tendrá la memoria final, sí podrá ofrecer unos estudios preliminares, confirma el concejal de Mantenimiento Héctor Díez.
Se ha hecho una licitación mínima pidiendo varios presupuestos menores pero finalmente será Imasa Lab, la firma que ha hecho los sondeos en el Pont del Bimil·lenari —aunque por motivos diferentes, por una losa de transición del puente—, la que se encargue de los mismos y este jueves se han hecho trabajos preliminares para analizar la estabilidad de los taludes. Algunos vecinos incluso se han ofrecido a dar información al conocer la zona, ya que el principal problema es que los socavones han aparecido en zonas de relleno de mala calidad. "Pero los edificios se levantan sobre terreno natural", apunta Díez. Tienen pilotaje.
En cualquier caso, la plataforma mencionada, diferente a la Asociación de Vecinos, ha acordado reunirse con el Ayuntamiento periódicamente para informarse no solo por los socavones, sino por las futuras y grandes obras que el equipo de gobierno quiere impulsar. No hay que olvidar que parte de los vecinos de la zona se constituyeron en esta plataforma porque son reticentes a proyectos como el de la pasarela volante, ya que para ellos la prioridad son los problemas estructurales del barrio y ahora en primera instancia los hundimientos. La plataforma por ahora está en contra del proyecto, aunque en la reunión se les transmitió que lo que está ahora en licitación no es la iniciativa final, sino que será una redacción que proponga el diseño y actuación a realizar.
Entre sus reservas de cara a la idea, está que esta pasarela que conectará desde Olegario Domarco Seller hasta el Pont del Bimil·lenari pueda romper la estética del barrio, que tenga problemas de accesibilidad para entrar a ciertas zonas de Carrús Este, que tape la visibilidad de las viviendas más bajas o que acabe costando una millonada. También lamentan que se les haya planteado a toro pasado, con el trámite en marcha, en lugar de que se hubiera consultado o planteado antes de todo. Y fuera de este proyecto, también trasladaron al equipo de gobierno la falta de aparcamiento en el barrio, o que de cara a la hipotética rehabilitación integral del barrio con los fondos europeos 'Next Generation' tengan que entregar parte de sus viviendas para la implantación de los ascensores exteriores. En cualquier caso, desde el Ayuntamiento se han comprometido con ellos a mantener reuniones periódicas para informar de estas cuestiones.