ALICANTE. El fallo del pasado 20 de marzo por el que se anula la Decisión de Recuperación de la Comisión Europea con base a la que el Hércules estaba obligado a pagar siete millones de euros no ha motivado finalmente que reformule sus cuentas del ejercicio pasado (de hecho, Alicante Plaza puede adelantar que ni se hace referencia a esa resolución entre los hechos posteriores al cierre).
Ahora bien, el próximo viernes 26 los accionistas tendrán que aprobar no solo esas cuentas del pasado ejercicio (y el presupuesto del presente), también de nuevo las del ejercicio 2017, después de haber sido estas reformuladas pasando de reflejar un beneficio de 367.636 euros a unas pérdidas de 514.430 euros. Un resultado que, unido al del ejercicio 2018 (pérdidas de 897.019 euros), nos lleva a unas pérdidas en dos ejercicios de más de 1,4 millones de euros, concretamente de 1.411.449 euros.
Criterios contables y patrimonio neto negativo
Respecto a la reformulación de las cuentas de 2017, esta responde a "criterios contables y corrección de errores" (por ejemplo, el traspaso al pasivo corriente de los 3.137.976 euros que se adeudaban a la Agencia Tributaria a raíz del incumplimiento del convenio suscrito con ella) y no afecta al patrimonio neto de la sociedad a 30 de junio de 2017 (-28.065.068).
Por cierto, a 30 de junio pero de 2018, ese patrimonio neto seguía siendo negativo (si el Hércules asciende el Consejo Superior de Deportes le emplazará a corregirlo de inmediato), pero ahora de 25.742.673 como consecuencia de la ampliación de capital por compensación de créditos de 3.138.897 que se acometió en junio, un canje de deuda por acciones que terminó comportando que Zassh Tecnológica casi duplicara su peso en el capital social, toda vez que las mercantiles de Enrique Ortiz y Juan Carlos Ramírez a las que el club blanquiazul les adeudaba esa cantidad le cedieron a Zassh la titularidad de los créditos con carácter previo al canje.