ELCHE. Archivado el expediente disciplinario que se había abierto al arqueólogo municipal, Víctor Cañavate, tras el caso de las exhumaciones sin contrato realizadas en el Cementerio Viejo. Así lo ha informado este miércoles el concejal de Recursos Humanos, Ramón Abad, señalando que el proceso investigador ha concluido después de seis meses sin ninguna responsabilidad administrativa, ya que no se ha observado ningún dolo, por lo que la única vía abierta con este caso es la judicial.
El pasado 1 de diciembre el equipo de gobierno incoó un expediente con información reservada acerca de las exhumaciones realizadas sin contrato en el camposanto. Tras encontrar el instructor posibles indicios sancionadores, se abrió un expediente disciplinario que finalmente una nueva instructora, Técnica de Administración General (TAG) con conocimientos jurídicos y designada por el Consistorio, ha concluido que debe archivarse sin ningún tipo de sanción. En su informe del 9 de junio asevera no encontrar dolo ni ninguna otra irregularidad. La instructora achaca los errores a la premura por lograr justificar la subvención obtenida, así como a la inexperiencia tanto del arqueólogo municipal como del TAG de Cultura. También que hubo confusión por parte del funcionario cuando se autorizaron las catas por parte de Conselleria, ya que el documento se titulaba 'Carta de adjudicación', lo que este interpretó como permiso para las obras. Así pues, el expediente hace suya la tesis del Secretario Municipal en su informe del pasado año, relatando los hechos cronológicamente.
El edil de Recursos Humanos, Ramón AbadAbad señala que tampoco hubo enriquecimiento ilícito de la administración, por tanto procede el archivo y se da fin a la vía administrativa municipal. Cuestionado sobre los nombres de miembros de la empresa antes de la adjudicación en el informe o que se cuadrara el presupuesto subvencionable, el edil responde que "el hecho de que en esa comisión técnica haya determinado que aparezcan esas personas que luego eran integrantes de la adjudicataria, la instructora entiende que ha podido ser un error o una confusión, pero que en ningún momento se aprecia dolo o intención a la hora de beneficiar a determinada empresa". Tras esto, tan solo queda visar el expediente por parte del concejal para su aprobación definitiva.
Asimismo, el TAG de Cultura, que también participó en la gestión del expediente que no acabó en la firma de un contrato con la empresa, no ha participado en el expediente, ya que ahora mismo está en Castellón, donde obtuvo una plaza recientemente. De hecho esto también ha retrasado la vía judicial, la única que queda abierta y que tendrá que dilucidar si hubo dolo. Después de que hayan declarado el arqueólogo y la edil de Cultura Marga Antón, el PP pidió que compareciera en el juzgado.
En retrospectiva, las posibles irregularidades en la actuación realizada en el Cementerio se conocieron tras un aviso del Partido Popular, ya se habían iniciado las exhumaciones sin la firma de ningún contrato con la compañía Drakkar, adjudicataria de la iniciativa. Poco después, con el revuelo de la situación, Vox advirtió que miembros de la firma ya figuraban en la memoria previa que se elevó para aprobación de la Junta de Gobierno; es decir, antes de que se le adjudicaran las obras, que debieron licitarse en lugar de tramitarse como un contrato menor. Asimismo, también hay otra serie de errores en el procedimiento, como que las obras se iniciasen sin finalizar el plazo de exposición pública.
