ELCHE. El equipo de gobierno ha decidido abrir un expediente informativo al arqueólogo municipal por el caso de las exhumaciones sin contrato en el Cementerio Viejo. Si bien con el informe del Secretario se explica la cadena de errores que llevó a no licitar la actuación e intentar gestionarla erróneamente como contrato menor, estos días se conocía nueva información. Miembros de la empresa de excavación Drakkar, que empezaría en agosto la excavación, figuraba ya en marzo en el expediente para justificar y explicar la subvención que se iba a pedir a la Generalitat.
De esta forma, una vez advertida esta situación, por la que reparó Vox en el pleno y mostró después, presuntamente se da a entender que aunque la compañía se escogiera en teoría semanas después, varios miembros de la empresa figuran desde el primer momento, participando en la justificación de la actuación para solicitar la exhumación. Algo que se comprueba cruzando el informe del secretario que muestra que la Junta aprueba el expediente de la subvención el 5 de marzo, con el informe del arqueólogo, donde se ve que en ese expediente del 5 de marzo para pedir la ayuda ya figuran estos miembros. Además de historiadores o técnicos municipales en materia de Archivo Municipal o Patrimonio Cultural. Una vez el Ejecutivo corrobora este hecho, es cuando decide este miércoles tener una reunión con los funcionarios implicados, el alcalde, el Secretario y los concejales de Contratación y Recursos Humanos para informar de la decisión adoptada.
Así, se ha abierto al arqueólogo municipal, quien elaboró el proyecto para pedir la subvención con la propuesta del equipo técnico, un expediente de información reservada para investigar qué ha sucedido y esclarecer los hechos. Se ha nombrado a un instructor y a un secretario del caso, que serán dos funcionarios del propio Consistorio, para que diluciden la situación. El alcalde Carlos González ha argumentado que "no se había puesto de relieve esta situación" hasta ahora, y que es un asunto aparte de la irregularidad administrativa a la hora de tramitar el no contrato. Ha mostrado "preocupación" por lo sucedido.
González ha incidido en que el expediente se acaba de abrir y que no se puede dar más información para respetar los derechos y garantías del funcionario concernido, que por otra parte está en situación de interinidad. Aún es pronto para especular si esto puede acabar en algún tipo de sanción, pero será lo que tenga que aclarar este expediente informativo si detecta algo más que errores administrativos.
Eso sí, tanto el alcalde como el edil de Recursos Humanos, Ramón Abad, han señalado en su comparecencia que cuando firmaron el 5 de marzo en la Junta de Gobierno pedir la subvención, no podían saber que los arqueólogos incluidos en el proyecto serían los que realizarían a posteriori la actuación. Además de no conocerlos, justifican que son los técnicos de área, en este caso el arqueólogo, quienes solicitan estas subvenciones y elaboran los parámetros del proyecto. En esa competencia entra también elegir quién formaba ese equipo técnico en el que había nombres que a la postre son los de la empresa de la exhumación.
Sobre si ha habido falta de fiscalización para advertir esta situación, Abad y González han asegurado que la solicitud de subvenciones entra dentro de los trámites diarios y no podían reparar en ese momento nada, dado que se trataba de una solicitud ordinaria más; habitual. Solo a posteriori, tras ver el Vicesecretario que no correspondía contrato menor, es cuando se ha podido advertir de esta anomalía que ahora se tendrá que clarificar. Sobre todo las dos cuestiones más llamativas: la participación de los futuros 'adjudicatarios' en la formación del expediente y cómo es posible que ofrecieran la misma cantidad que el coste calculado de la intervención. Si esto explica o no que se intentara tramitar como contrato menor, será algo sobre lo que tiene que arrojar luz la anunciada investigación.