ELCHE. Tras un primer debate general de la ciudad de este jueves, con similitudes y ciertos matices, con la misma jornada del pasado año, este viernes se celebraba el debate entre grupos políticos. Más similar a un pleno. Un toma y daca que fue por los derroteros previstos, con la oposición clamando contra las políticas de PP y Vox, enumerando como viene siendo habitual proyectos heredados que el Ejecutivo está ahora materializando, o su despilfarro. Por su parte, el equipo de gobierno sacó pecho de su gestión, advirtiendo a PSOE y Compromís que lo dicho por los distritos era un ejemplo claro de su aval.
La parte de mayor interés ha sido el anuncio del alcalde Pablo Ruz de la enajenación de los terrenos de Vallongas y Saladas, es decir, del Porta d'Elx y de la ampliación del Parque Empresarial. Fuera de ello, un claro tono preelectoral, cada grupo marcando terreno propio, y con asuntos a analizar, en parte a colación de las intervenciones, como los asuntos que no se tocaron en la jornada del jueves. Ocurre a menudo en los plenos, y esta vez no ha sido menos, con los dos partidos en la oposición haciendo de tándem, complementándose en las intervenciones.
Compromís contra las promesas y el perfil ideológico
Los primeros en intervenir eran Compromís, donde Esther Díez trataba de poner en el foco primero en la falta de participación de sindicatos (CCOO denunciaba la ausencia una vez más), la federación de asociaciones vecinales, o las universidades, entre otros. Trataba de contextualizar el momento. A su juicio, mucha pose y "política" fácil frente a retos y problemas actuales como la vivienda, la cesta de la compra o en general las condiciones de vida. Hacía un repaso a los grandes compromisos que aún no han llegado y se comprometieron, como el tranvía, el centro de salud de Torrellano —aludiendo a que ningún vecino lo comentó—, el Palacio de Congresos o el conservatorio. En aquellos casos que hay avance autonómico, "tramitaciones muy iniciales".
Considera que el equipo de gobierno ha llegado tarde a la crisis de vivienda, destacando que aún "sin ayudas al alquiler", y con un modelo a su juicio "equivocado", en referencia al plan Casa Fácil, ya que implica que parte del suelo público se destina a viviendas de venta privada. Y que a su vez, "aunque no estamos en contra de la colaboración público-privada, este modelo ayuda a incrementar parte del problema", decía en referencia a que una vez se descataloguen como viviendas protegidas en el futuro, no habrá diferencia, y se ayuda al incremento de los precios. "Ustedes priorizan la ley de la selva al orden en medio de esta vorágine especulativa".
Ponía el foco en "promesas insostenibles", señalando que evitan ayudar a familias en momentos difíciles, y que en esta "era de la crueldad", defienden "discursos en los que se pide abandonar a colectivos vulnerables". Les ha reprochado no acudir al acto del 30 aniversario de Elche Acoge, no reconocer con sus votos al movimiento obrero, no decir nada sobre la polémica con Ribera Salud, ni condenar los abusos en la Iglesia, pero sí "arrinconar el valenciano y hacer homenajes al franquismo". Tras el relato de mociones de Compromís rechazadas, Díez acusaba al alcalde de "proteger a Mazón".

- Esther Díez - AP
Le recordaba al alcalde que no ha explicado los tiempos de licencia con la obra de su casa, de nuevo que la religión coja peso en el espacio público y que "se le pone cara de Mercedes Alonso, aunque ella no llegó a algunas cosas que ustedes están haciendo. Trate a la gente con honestidad intelectual y no acuda al recurso fácil de que estamos de vacacaciones".
El PSOE va de los aparcamientos a los distritos
Desde los socialistas, el portavoz Héctor Díez trataba de empezar desarticulando uno de sus principales ejes, el de la rebaja de impuestos. "Han subido los recibos de la basura, se han triplicado y sube el agua un 10%". A través de denuncias ciudadanas, se centraba en quejas de "mucha ornamentación mientras barrios y parques están descuidados", "arquitectos que esperan meses para una licencia que usted consigue en apenas dos", mención al "llévalos a tu casa" que dijo el alcalde en televisión nacional a un tertuliano sobre los 'menas', además del problema con los contenedores en el campo, también "homenajes al régimen y a un poeta falangista" o que se haya olvidado de bonos de ayuda a compra de libros o de las 1.500 plazas de aparcamiento, llevándose el panfleto de 'Confía' que repartía el entonces Ruz candidato.
Aunque el edil rebajó algo el tono respecto a los distritos, reconociendo la normalidad de que se centren más en el día a día que en las cuestiones de fondo de consejos sectoriales, planteaba que algunos con años sin reuniones lo habían hecho solo para elegir portavoz. "Salvo honrosas excepciones, hay gente que subió a enumerar la gestión de sus méritos, el parte de mantenimiento, las bondades del equipo de gobierno que le ha nombrado, otros se dedicaron a a arremeter contra la oposición y ahí no hay duda: son parte del gobierno. Por no hablar de la estructura de intervenciones, algunas calcadas".

- Héctor Díez - AP
Lo que no se dijo desde los distritos
Iba más allá, y le parecía llamatico que nadie hablase de las propuestas de gobierno que no se ejecutan "incluso después de casi 3 años". Y les apelaba, "están ustedes para ser la voz de los vecinos", rechazando el ponerse como presidente de Vox o PP antes que de distrito. "En alguna pedanía llevan meses sin pediatra, ni médico de familia y no se ha dicho. Otras llevan años reivindicando que zonas deportivas pasen de tierra a césped. Todas las juntas vinieran al pleno a trasladar que en el campo se los comen los mosquitos. Que el campo está lleno de basura, lleno de vertidos alrededor de los contenedores". Y se preguntaba, "¿y nadie lo dice? No los representan, vinieron a no incomodar. Y eso dista mucho de representar a los vecinos".
Díez, que trató de mostrarse como alcaldable, hablando de cómo los vecinos le planteaban las quejas en esos términos, y se centró en que hay mucho por hacer ante alquileres altos, "dar decenas de vueltas para aparcarar o suciedad. Es la recta final de la legislaura, y estamos con más embustes que verdades. Con más promesas que hechos". También incidió en proyectos heredados que son de PSOE y Compromís.
Rodil y Navarro, a por la gestión del bipartito
Por parte del equipo de gobierno, optaron por defender su gestión y no responder a la oposición. Así lo planteaba Aurora Rodil por Vox. "No voy a responder a una izquierda amargada y frustrada que solo pregunta a los suyos". Defendía que Elche "avanza" y que han llegado para "defender la familia, proteger la infancia, fortalecer las pedanías, y defender las tradiciones". Se mostraba orgullosa de haber vetado propuestas de "ideología de género" o que "cuestionaban la autoridad de la familia". Ponía en valor el proyecto de prevención psicológica para jóvenes y la salud mental, el código NES de atención a los mayores y aquellos que están en situación de soledad.
Y que rechazan "el sistema de paguitas, el clientelismo político que hace a las personas dependientes. Ayudar sí, pero con proyectos, no clientes". Y hablaba de las políticas de empleo y medidas de empleo. Una vez más, quejándose de la presidenta y compañera de gobierno, Irene Ruiz, porque la teniente de alcalde de Vox pensaba que acababa el tiempo y Ruiz le recordaba que no, a lo que Rodil volvía a pedir que no la interrumpiera. Ponía en valor medidas para captar inversión y que pronto habrá novedades de la escuela de calzado y la learning factory.

- Juan de Dios Navarro - AP
Tres cuartas partes de lo mismo, en cuanto a línea a seguir, fue la del concejal Juan de Dios Navarro por el PP. Rompió una lanza a favor del formato del debate, defendiendo la independencia de los distritos y que ahora el alcalde habla un porcentaje muy reducido frente a la época de Carlos González. Criticó varias veces a los progresistas, "ustedes siguen fieles a su estilo, haz lo que yo diga pero no lo que yo haga". Y empezó la retahíla de propuestas o iniciativas en marcha: la pasarela de Altabix, limpieza de barrancos, las licencias de taxis, los acuerdos para Clarisas con el Consell, el plan Casa Fácil, las plataformas únicas, los mil árboles plantados, solucionar la fachada de El Progreso, recuperar los huertos... Y defendía que el bus a pedanías y los 1,3 millones de pasajeros en diez meses "bien vale una legislatura".
El alcalde trata de desacreditar a la oposición y defiende 55 hitos
Cerró la primera y más larga tanda el alcalde Pablo Ruz, una vez más con lo mismo: defendiendo el formato del debate y su versión. Que sí han cumplido con las bajadas de impuestos (IBI, IAE, Icio...) y que han de seguir "montando saraos" para que la gente venga. De ahí hablaba del año jubilar y la visita de más de un millón de turistas según el organismo autonómico. Cuestionable según cómo se mida y lo que se mida. Como siempre, todo depende del enfoque.
Ruz defendió que "literalmente no se puede hacer más", decía, hablando de 55 hitos de la legislatura, muchos de ellos mencionados por Navarro y Rodil como miembros de gobierno, a los que sumó su área de patrimonio con el Museo del agua en el Molí del Real, la recuperación casa de la Virgen "a punto de colapsar", el Hort del Xocolater y el Museo del Huevo... Y como PSOE y Compromís, que hacían referencia a lo que harían cuando volviesen al gobierno, el alcalde hablaba de lo que toca el año que viene: la reforma de la plaza del Congreso Eucarístico, desarrollar el Porta d’Elx, el Parque Empresrial, finalizar el Mercado Central, empezar las obras en Jayton, entorno del estadio o finalizar el centro social de Torrellano.
Una intervención que dio pie a la segunda ronda, con dinámica de reproches y críticas habitual de los plenos, con la oposición aludiendo a la renuncia al nuevo Plan General y la planificación urbanística, las colas sanitarias y el colapso en la educación, el envejecimiento en los barrios y el ornato. Desde el gobierno, de vuelta a la carga con "intervenciones neocomunistas", decía Rodil, o que "la izquierda no hizo ni una vivienda pública", decía Navarro. Para cerrar el ciclo, el alcalde acabó con una arenga final destacando la labor a cada edil, uno a uno. Previamente, una vez más, había intentado sembrar la duda sobre Héctor Díez como alcaldable y que ni ellos ni Compromís tenían nada que hacer en las pedanías, mostrándose confiado por su trabajo allí.