ALICANTE. Las piezas del pacto entre la Conselleria de Agua, Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio y el Ayuntamiento de Alicante comienzan a encajar para que pueda ponerse en marcha el proyecto de ampliación de la Vía Parque. Ese puzle comprendía, en primer lugar, que la administración local actualizase los proyectos constructivos redactados hace cerca de dos décadas sobre los tramos que todavía discurren con un carril por sentido, entre Rabassa y la avenida de Orihuela. Y en segundo término, que se concretasen los pliegos de los concursos necesarios para contratar su ejecución, con el compromiso de que sería la Generalitat quien asumiría su financiación.
Todo ese proceso estaría ahora encarrilado para poder disponer de al menos dos carriles de circulación por sentido en ese tramo -con una mediana ajardinada a modo de bulevar- en la medida en que la Concejalía de Urbanismo estaría finalizando ahora la redacción de las bases de esa licitación con el propósito de abrir esos proyectos a la presentación de ofertas y adjudicar el desarrollo de las obras, según concretó este jueves la edil responsable del área, Rocío Gómez, en una comparecencia pública con motivo de la visita girada a la reforma del parque de El Palmeral.
"Estamos pendientes de firmar el convenio con la Generalitat" para que sea el Ayuntamiento quien impulse la licitación de las obras, apuntó. "Para nosotros es fundamental tener ese control, ya que es una vía muy importante para la ciudad, que debe permitir llevar el tráfico rápido" hacia el exterior del casco urbano, añadió, en la línea de los objetivos marcados en la estrategia Alicante 4D como base para la redacción del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).