ALICANTE. Francesco Balbi (Catania, 1966) asume la responsabilidad de dirigir la terminal marítima de cruceros del Puerto de Alicante como general manager de Alicante Cruise Port en la nueva etapa iniciada por su actual operador, Global Ports Holding (GPH), a partir de 2023. Lo cierto es que ya disponía de experiencia previa como máximo responsable de la concesionaria precedente, Costablanca Portuaria, en una trayectoria a la que suma su papel como presidente -y uno de los impulsores principales- de la asociación Alicante Costa Blanca Turismo y Cruceros (ACBTC), dedicada a la promoción de Alicante como destino de barcos turísticos desde 2017.
En esta conversación con Alicante Plaza, analiza la evolución de las escalas en la ciudad -justo en una semana en la que se había programado seis atraques de buques turísticos, con la expectativa de recibir hasta 20.000 visitantes-, así como las oportunidades de futuro que se plantean a corto y medio plazo. Al margen de las opciones de captar los embarques de nuevas compañías, destaca la cooperación público-privada para vender y mejorar la oferta de la provincia, y no contempla que exista un hipotético riesgo de masificación por la llegada de cruceristas.
-Pregunta obligada. ¿Cómo evoluciona la temporada de verano en la terminal?
-Muy bien. Nunca hemos tenido veranos así. Alicante está redescubriendo el verano. Antes, la campaña de cruceros en Alicante se limitaba a los meses de abril-mayo, y octubre-noviembre. Eran sus dos periodos fuertes. Ahora hemos añadido el periodo de verano, lo que es buena señal.
-De hecho, hasta julio se han superado ya los 126.617 cruceristas, según las estadísticas de Puertos del Estado. ¿Se alcanzarán los 267.000 que se esperan para el conjunto de 2025?
-En total del año, creo que superaremos seguro los 250.000. Tocaremos ese techo, y me parece que, a lo mejor, puede que lo superemos.
-¿Existe un 'techo' máximo para esas cifras de recepción de cruceristas?
-Si el Puerto nos acompaña, no hay máximo. Me refiero a que la infraestructura tiene que acompañar el crecimiento de los pasajeros. Es lo que ya se está haciendo, por ejemplo, con la construcción de dos duques de Alba. El apoyo que nos está prestando el Puerto es fundamental para el crecimiento sostenible.
-¿Qué va a suponer la construcción de esas infraestructuras?
-Los duques de Alba nos permitirán amarrar dos buques de 350 metros de eslora contemporáneamente, en el mismo muelle.
"Creo que se puede poner el foco en vender el destino en invierno, porque podríamos crecer sin sufrir en presión sobre el tráfico. Podríamos llegar a 150 escalas, sin sufrir"
-Entiendo que se van a construir porque se ha detectado su necesidad.
-Claro. Nos lo estaban pidiendo. Disponibilidad de atraque. Y no solo eso. Nos dará la oportunidad de amarrar hasta tres buques de media dimensión en el mismo muelle porque los dos duques de Alba prolongan el muelle existente.
-Se acaba de adjudicar ahora la redacción del proyecto. ¿Se tiene alguna idea para cuando pueden comenzar las obras?
-Las cosas de palacio van despacio, pero esperamos poder contar con los dos buques de Alba para el verano de 2026.

-Volviendo a la pregunta precedente. Comenta que con el apoyo del Puerto en infraestructuras, no hay un techo máximo de cruceristas a la vista. Pero, ¿debería haberlo? Y, en ese caso, ¿cuál sería la cifra recomendable para el Puerto de Alicante?
-El límite hay que establecerlo entre las instituciones, porque el puerto es una puerta de acceso a la ciudad. Luego también es tarea de la ciudad adecuar la oferta turística y la viabilidad al número creciente de pasajeros. Es un trabajo en común que hay que hacer para que no pase lo que está pasando en otros destinos. Pero la colaboración es máxima. Creo que podemos llegar fácil a recibir 300.000 cruceristas en un año sin sufrir, contando con las infraestructuras actuales. A 400.000 no sabría decirte. Pero sí creo que se puede poner el foco en vender el destino en invierno, porque podríamos crecer sin sufrir en presión sobre el tráfico. Podríamos llegar a 150 escalas, sin sufrir.
-Ya estamos viendo algunos límites en puertos como el de Barcelona. E incluso en Alicante también se están adoptando algunas primeras medidas para regular cuestiones como el crecimiento de los pisos turísticos. ¿Hay riesgo de una hipotética masificación que lleve a restringir aquí la llegada de cruceristas?
-Creo que no. Primero, porque el crucerista no es un turista estancial nocturno. Entonces, puede inundarte una ciudad y a las seis de la tarde se van todos. Puede ser algo limitado a unas pocas horas. Segundo: el número de cruceristas es un porcentaje mínimo respecto al número total de turistas que vienen a Alicante. ¿250.000 qué es en un año respecto a la cantidad global de turistas que recibe Alicante? Es muy poco en realidad. Los cruceros son, en realidad, una oportunidad para el comercio de poder reordenar sus ingresos, y para que el crucerista pueda ser referente para un futuro turista, como prescriptor de viaje, o como futuro viajero.
-Gran parte del éxito de las cifras actuales deriva del puerto base de MSC Cruceros. ¿Hasta cuándo se cuenta con su permanencia en Alicante?
-La afirmación no es del todo correcta. El éxito, sí, deriva en buena parte de MSC, de la confianza que ha depositado en el destino. Pero sobre todo viene del trabajo conjunto que está haciendo toda la ciudad para vender Alicante como destino turistíco, muy atractivo y sostenible. Y respecto a la permanencia de MSC, ya hemos conocido la confirmación de su puerto base para 2026. En principio, esperamos 15 escalas para el próximo año.
"El éxito de las cifras viene sobre todo del trabajo conjunto que está haciendo toda la ciudad para vender Alicante como destino turistíco, muy atractivo y sostenible. Y respecto a la permanencia de MSC, ya hemos conocido la confirmación de su puerto base para 2026"
-¿Por ahora su permanencia se viene confirmando solo año a año?
-Sí, año tras año. De momento no hay un año límite a la vista. Pero, como sabemos, todo es moda. A lo mejor, un itinerario que ha estado cinco o seis años repitiéndose, necesita un pequeño cambio. A lo mejor pondrán Alicante en otro itinerario, con otra ruta y otros destinos. De momento este itinerario va muy bien, con recorrido por Portugal, Francia, Italia y España.
-¿Existe la posibilidad de que se recupere la campaña de embarques de invierno que se implantó en 2023, o eso no está contemplado?
-No con MSC.
-Este diario ya ha anticipado que existen expectativas de contar con alguna otra naviera que también implante su puerto base en Alicante, tras las pruebas que pretenden llevar a cabo Costa y Fred.Olsen... ¿puede ser un camino?
-Sí, vamos a hacer dos test con Costa Cruceros y con Fred.Olsen. Son números limitados de puerto base. Pero el test ya nos abre la puerta para que en un futuro se pueda convertir en estacional. Esperemos que 2027 y 2028 tengamos a más de una compañía haciendo base en Alicante. Sin quitar nada a MSC, que ha sido el primer amor, y que no se olvida nunca.
-¿Qué piden las navieras para programar escalas en Alicante y qué falta por habilitar?
-Piden algo que ya tenemos y que han descubierto gracias a nuestra acción comercial: un operador fiable y de experiencia, como Global Ports Holding; piden una infraestructura capaz de recibir embarques y desembarques; piden conexiones con otros destinos -aéreas, de carretera, de tren-, y Alicante está muy bien posicionada en el ámbito nacional e internacional; y piden experiencia y capacidad. Y luego piden a la ciudad, capacidad de atraer a turistas. Que la ciudad se una a nuestro esfuerzo para tratar a los clientes lo mejor posible. Eso se cumple en cuestiones como por ejemplo abrir en festivos, en domingos cuando hay barco... Cosa que ya me consta que se está haciendo.
-¿Por qué mercado o país de origen habría que apostar a la hora de captar nuevas escalas?
-Por los americanos, primero. Y luego, Alicante es una provincia históricamente británica. Hay que potenciar al cliente británico, buscar al americano y, posiblemente, buscar otros clientes de otros países como Francia o Italia. Pero el objetivo principal es el crucerista americano. Hasta ahora el mayoritario es el inglés, que ama esta provincia. Más que el alemán.
"Hay que potenciar al cliente británico, buscar al americano y, posiblemente, buscar otros clientes de otros países como Francia o Italia. Pero el objetivo principal es el crucerista americano"
-Uno de los últimos propósitos que se ha tratado de materializar, sobre todo, este año es la captación de cruceros del segmento de lujo, con menor capacidad pero con turistas con mayor poder adquisitivo. ¿Qué resultados se está obteniendo?
-Ahí hay que hacer un trabajo más fino. El cliente es más exigente. Es verdad que deja mucho más dinero, pero es mucho más exigente y hay que estar al detalle. Muchas veces las experiencias que el cliente quiere vivir son casi unas experiencias de carácter personal. Ya no se trata de una excursión con un autobús, sino de algo especial que a lo mejor requiera el uso de un coche privado. Tiene que ser algo único. Entonces, está costando un poco más. Hay que entender las necesidades de este perfil. Pero veo que está aumentando. El tráfico de cruceros de lujo está aumentando. Y repito, lujo americano.
-¿Qué porcentaje estaría representando ese segmento de lujo hasta ahora?
-De momento todavía es algo residual, de en torno a un 5%. Pero a nivel de rentabilidad es bastante alto. Es un cliente que no ves, muy discreto, solo para unos pocos nichos de proveedores muy especializados.

-¿Se está atendiendo a las peticiones de aumento y de renovación de la oferta de excursiones y experiencias que se plantea desde ACBTC, la asociación que preside?
-La asociación está trabajando continuamente en esto y continuamente propone nuevas experiencias. La versión actualizada de esa oferta la acabamos de publicar y nos la llevaremos a la feria Seatrade de Hamburgo, entre el 10 y el 12 de septiembre, para dar la última revisión. Son de todo tipo. De lo más popular a lo más específico. Se está trabajando muy bien y con respuesta muy atenta por parte de los proveedores de servicios. Mi tarea ahora en Hamburgo será posicionarnos cada vez más en lo que ya tenemos, actualizando excursiones, servicios, introduciendo a las navieras los trabajos que se están haciendo por parte de la terminal, del Puerto, del Ayuntamiento, del conjunto de las instituciones, de la provincia, de los patronatos. Lo que quieren escuchar es que estamos trabajando para ellos.
Sobre el segmento de los cruceros de lujo: "Ahí hay que hacer un trabajo más fino. El cliente es más exigente. Es verdad que deja mucho más dinero, pero es mucho más exigente y hay que estar al detalle. Muchas veces las experiencias que el cliente quiere vivir son casi unas experiencias de carácter personal"
-¿Cómo están funcionando las mejoras implantadas con la remodelación ejecutada en la terminal en 2024?
-Es una maravilla. Estamos recibiendo enhorabuenas y felicitaciones por todas las navieras que nos vienen a visitar. Tenemos informes por parte de los barcos muy positivos. Se van encantados porque es una infraestructura sencilla pero muy acogedora, con un estilo muy juvenil, colores muy frescos, marinos, y servicios excelentes. Tenemos hasta siete escáneres para recibir cualquier tipo de crucero. Tenemos un área de facturación lo suficientemente amplia para poder hacer embarques y estamos demostrando que no tenemos miedo a nada, y que podemos ofrecer nuestros servicios a cualquier tipo de cliente, gracias al trabajo de todos y al mejor operador del mundo, que es Global Ports, que garantiza un servicio excelente.
-Uno de los objetivos que se había planteado es el de fomentar el uso de la terminal como sede para eventos. ¿Está habiendo demanda?
-Sí, de hecho, hemos estado haciendo eventos. Ahora no, porque es temporada alta de cruceros, pero sí estamos en contacto con potenciales clientes y tendremos eventos a finales de año, que es cuando podemos conceder el espacio. Se trata de eventos no de todo tipo. Eventos de perfil alto, de carácter corporativo.
-La Autoridad Portuaria anunció en marzo que presentaría candidatura para acoger la CLIA Week de 2026. ¿Existen opciones de que Alicante sea la sede de esa cita?
-Existen opciones, pero ya no para 2026. Ya es tarde. Pero CLIA se ha fijado en el destino Alicante. Solo nos tiene que decir cuándo se decantará la ciudad. La cita se celebra un año en el sur de Europa y el siguiente año en el norte de Europa, así que podría ser el 27 o el 28. Pero el destino les ha encantado. Pero, insisto: todo esto no podría ser posible sin algo que todo el mundo nos envidia, que es la cooperación público-privada. Tenemos un gran Ayuntamiento, una gran Diputación, un gran respaldo de la Comunitat, de las asociaciones… Todos a una. Estamos viviendo un periodo de oro. Están todos involucrados en esto porque han visto el beneficio que da no solo desde el punto de vista monetario, sino en imagen, en calidad de destino y de profesionalidad. Tengo que agradecer también a todos los agentes que reciben estos barcos, desde los prácticos a los remolcadores, a los consignatarios... No es sencillo pero estamos todos a una. Esto te indica que es complicado mover este tipo de negocio, y que hace falta la colaboración de todos los actores. Sobre todo las ganas de hacer cosas.