ALICANTE. La transformación urbanística del Centro de Alicante ya no tiene marcha atrás. El equipo de gobierno, ahora compuesto por el Partido Popular (PP) en solitario, avaló este jueves el inicio de las obras de reurbanización del eje comprendido entre General Marvá y Doctor Gadea al aprobar en una sesión extraordinaria de la Junta Local (la primera del nuevo mandato con decisiones ejecutivas) el acuerdo de autorización de cierre al tráfico: el último trámite administrativo preceptivo antes de la ejecución de los trabajos.
De este modo, las obras de reurbanización darán comienzo este próximo lunes, día 26, en lo que supondrá, de facto, la continuidad de parte de las restricciones a la movilidad acordadas con motivo de la celebración de les Fogueres. De hecho, el corte a la circulación se aplicará en todo el ámbito de actuación de manera simultánea, desde el cruce de General Marvá con Benito Pérez Galdós hasta el parque de Canalejas, y -salvo complicaciones que fuercen a ampliar plazos- se prolongará durante los próximos seis meses, como se anticipó hace una semana. Eso sí, las intersecciones serán permeables de modo que se podrá transitar por Pérez Galdós; desde la avenida de la Estación hasta Alfonso el Sabio; desde Calvo Sotelo a Maisonnave, y desde Reyes Católicos a Calvo Sotelo, como informó este diario.
A esa actuación se sumará a partir del 3 de julio el cierre de los cuatro carriles del Paseo de los Mártires de la Libertad, en el frente marítimo de La Explanada, aunque en este caso se espera su reapertura con la llegada del mes de septiembre y el inicio del nuevo curso escolar. El calendario de obra concertado entre el Ayuntamiento y la empresa adjudicataria (Pavasal) contempla que, para entonces, ya se haya instalado la mediana central ajardinada que estrechará sus cuatro carriles y forzará a aminorar la velocidad de la circulación, con la consiguiente reducción de emisiones contaminantes a la atmósfera. Es decir, el objetivo del conjunto de las obras previstas, incluidas en la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que toda ciudad de más de 50.000 habitantes está obligada a implantar en enero de 2024 a instancias de la normativa europea traspuesta por el Gobierno Central, a través de la Ley de Transición Energética y Cambio Climático.
Además de la prohibición de estacionamiento en superficie sobre el eje encuadrado en el proyecto de reurbanización, está previsto que se restrinja el acceso a los garajes particulares encuadrados en ambas aceras de Marvá, Soto y Gadea. No obstante, esa prohibición de uso -que no será inmediata, y por tanto, no regirá desde el día 26- se abordará por tramos y solo en las fases en las que resulte necesario. De este modo, se restablecerá su utilización en cuanto la evolución de los trabajos lo permita. Es decir, cuando el pavimento vuelva a ser practicable.
Por lo pronto, el equipo de gobierno tiene previsto celebrar una primera reunión informativa con los residentes, comerciantes y hosteleros afectados por el desarrollo de las obras en los próximos días (una vez celebradas las elecciones municipales y, también, las fiestas de Fogueres), al margen del despliegue de una campaña de buzoneo en las fincas encuadradas en esas tres grandes avenidas para anunciar el comienzo de los trabajos. Fuentes consultadas indicaron que en ese encuentro se detallarán las fases de la intervención prevista y se tratará de resolver las dudas que puedan plantearse.
Se espera que también se pueda concretar la disposición de posibles bonificaciones fiscales -al margen de las ya previstas en las ordenanzas fiscales con motivo del desarrollo de obras- en compensación por las molestias generadas. Esas medidas podrían traducirse en la exención o reducción de la tasa de vados o en la de veladores, por ejemplo. Al tiempo, se prevé mantener reuniones de seguimiento periódicas para compartir información sobre el avance de las obras y ajustar posibles disfunciones que pudiesen plantearse, según las mismas fuentes.
La primera intervención correrá a cargo de Aguas de Alicante, que debe sustituir las redes de suministro y saneamiento instaladas en el subsuelo antes de que den inicio los trabajos de reurbanización en el nivel de superficie. Como informó este diario, se ha previsto la disposición de ocho equipos de trabajo simultáneos en el conjunto de la zona de obras.
Se espera que esa actuación sobre las canalizaciones pueda extenderse durante un plazo de tres meses. En todo caso, Aguas cederá el testigo a las constructoras adjudicatarias de las obras de reurbanización en el momento en el que haya concluido su intervención para que se produzca una concatenación de las dos actuaciones: obras hidráulicas y de reurbanización.
Entre tanto, el equipo de gobierno también ultima la disposición de cartelería y señalización para informar sobre las restricciones a la circulación en el ámbito afectado por las obras y sobre los itinerarios alternativos recomendados. En paralelo, se aconseja el uso del transporte público para los desplazamientos al Centro con el fin de evitar atascos y aglomeraciones en su perímetro. De hecho, se prevé evaluar un posible refuerzo del servicio de autobús en el supuesto en el que se teste la demanda existente en los primeros días del corte.
En principio, por extensión del ámbito del casco urbano afectado (que no por presupuesto), se trata de una intervención posiblemente solo comparable con las obras antirriadas desplegadas hace 26 años en ejes como Óscar Esplá, Calderón de la Barca o La Rambla. En todo caso, su duración será menor y, según fuentes municipales, se espera un perjuicio moderado entre los residentes del Centro al coincidir con el periodo estival, en el que se suele producir un traslado a segundas viviendas en el Distrito de Playas.
Sin embargo, está por ver cuál puede ser el impacto que pueda ocasionar a todos los negocios vinculados a la actividad turística. Hasta ahora, los hoteleros agrupados en APHA ya han expresado su rechazo a la fecha escogida para el cierre del frente marítimo de La Explanada, en plena campaña turística. Y también han manifestado su preocupación respecto a las implicaciones del desarrollo de la ZBE, junto a hosteleros y comerciantes.