El alcalde de Alicante, Luis Barcala, y el edil de Presidencia y Fondos Europeos, Toño Peral, en una visita al complejo de Cigarreras.ALICANTE. Nuevas necesidades detectadas durante la ejecución de los trabajos, y la conservación de elementos patrimoniales que requieren de protección. Esos son los dos factores esenciales que han llevado al equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, del Partido Popular (PP), a consumar la aprobación de un primer modificado del proyecto de reforma y recuperación integral de la antigua Casa de Misericordia incluido en la primera fase de la rehabilitación del complejo cultural Las Cigarreras.
Lo cierto es que no se trata de un modificado menor. La previsión con la que se venía trabajando desde el pasado mes de mayo apuntaba que resultaría imprescindible introducir variaciones que conllevarían un incremento del 30% respecto al presupuesto inicial de los trabajos. Y esos cálculos se han confirmado ahora con un aumento de costes de más de 2,8 millones respecto a los 9,2 con los que se cerró su adjudicación a la constructora Orthem, en febrero de 2023.
De este modo, la inversión total destinada a la intervención en ese primer edificio se elevan por encima de los 12,4 millones (12.453.789,20 euros) para cubrir esas nuevas unidades de obra a implementar que no se contemplaron en el proyecto original y que se habrían considerado imprescindibles al conocer el estado de conservación del inmueble durante la realización de las obras.
¿Qué trabajos adicionales se incluyen ahora? Según el acuerdo por el que se da alas al modificado, aprobado este miércoles en la reunión semanal de la Junta de Gobierno, se trata de medidas encaminadas a sustituir o reforzar elementos deteriorados, como las vigas de madera que se preveía mantener, o la realización de refuerzos en la cimentación del edificio. Además, se plantea la apertura de un espacio de terraza en la cubierta del ala norte del inmueble y el traslado de las instalaciones fotovoltaicas que se pretendía incorporar en esa primera fase hasta los edificios de la segunda fase de la rehabilitación del complejo.
Al margen de ello, se incorporan otras actuaciones para preservar los hallazgos de carácter patrimonial aflorados durante las excavaciones, entre los que figuran un antiguo refugio antiaéreo de la Guerra Civil y parte de una fuente del claustro norte, como elementos más destacados. Pero también un arco ojival encontrado en el deambulatorio norte de la planta primera, distintas bóvedas, restos de la antigua calzada que conducía a la fábrica y pavimento de losas de piedra. El proyecto modificado promueve su recuperación, consolidación e integración en el edificio rehabilitado.
El conjunto de los trabajos contemplados en esa primera fase del proyecto estarían muy avanzados. De hecho, se había llegado a anticipar que al menos parte de los espacios ya recuperados podrían quedar listos para albergar los nuevos usos públicos previstos en octubre de este año, mientras que el conjunto de la intervención debía concluir en el último trimestre de 2025. Con todo, todavía no se ha llegado a producir una apertura parcial de esas nuevas dependencias destinadas a albergar usos culturales y administrativos.
Las obras -cofinanciadas con fondos Edusi- se iniciaron de forma efectiva en abril de 2023, con la previsión de que quedasen concluidas 30 meses después. A partir de entonces, se abordará el desarrollo de otras tres fases más en los distintos edificios que conforman el complejo, a partir de la planificación detallada en el proyecto diseñado por Ramón Esteve estudio de arquitectura.
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