Referentes de PSOE ilicitano piden a Carlos González que exija más cuota en la lista municipal

ELCHE. La gente que hasta el momento ha dado su respaldo al alcalde de Elche, Carlos González, sostienen que no debe conformarse con lo que imponga la mayoría de la agrupación, controlada holgadamente por los sanchistas. Defienden que el alcalde también debe tener a sus hombres de confianza en futura candidatura local, de ahí que varios referentes de la agrupación ilicitano hayan trasladado al primer edil la necesidad de fuerce una negociación previa y que no lo deje todo a la elección de la lista, algo que se producirá en las próximas semanas.

Y es la gran diferencia que procesos anteriores, esta vez, la confección de la listas es abierta, lo cual es un arma de doble filo porque hay tantas posibilidades de entrar o como quedarse fuera de la lista, de ahí que haya militantes que estén conminando a González a buscar un pacto previo sobre la candidatura, con la posibilidad de que el reparto de los futuros esté más equilibrado frente a una más que segura mayoría sanchista.

¿Se producirá esa negociación previa? Pues a día de hoy nadie sabe qué pasos adoptará el alcalde de Elche ante una agrupación que no controla. El pasado mes de abril, el ex alcalde, Alejandro Soler, hoy director general del Sepes, venció en la carrera por la secretaría general por 263 votos frente a los 174 de su rival, la edil de Hacienda Ana Arabid, que fue la candidata que respaldó el primer edil. Pese a esa victoria, Soler evitó forzar unas primaras y respaldó a González como candidato a la Alcaldía de Elche.

Esos mismos referentes sostienen que el mayoría sanchista que respalda a Soler no es homogénea, por lo que puede ser una baza para González para buscar una negociación previa que evite una votación que deje vencedores y vencidos, al estilo de lo que pasó después del verano cuando se evitaron a toda costa las primarias. Y ahí está la partida: saber qué movimientos juega el alcalde y como logra tener más gente de su confianza en la futura, en la que ya hay nombres que circulan por los mentideros. Esta vez, el tiempo apremia, y nadie quiere conflictos ante la movilización de la derecha.