Una Primera Federación con cuatro subgrupos de diez conjuntos cada uno en la temporada 2023/24

ALICANTE. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) sigue decidida a llevar a cabo un cambio de modelo competitivo para la Primera Federación, algo que comparten los clubes, aunque muchos discrepan de buena parte del contenido de las propuestas que hace el organismo que preside Luis Rubiales. 

El debate promovido desde La Rozas encalló hace unos meses, pero con la finalización de la temporada y la celebración de la consiguiente Asamblea General las partes están obligadas a abordar el asunto... y ya se conoce una nueva perspectiva desde la que se va a hacer, distinta de la relativa al 'fair-play' financiero y/o a las ayudas federativas. 

Lo anterior ha sido posible al publicarse las bases de licitación de la comercialización de los derechos audiovisuales de la categoría para las próximas tres campañas. En las mismas la RFEF advierte a los licitadores de que el sistema de competición con dos grupos de 20 equipos cada uno puede verse alterado: "Dichos grupos podrán, a su vez, subdividirse en dos subgrupos de 10 en cada una de las fases competitivas cuando las circunstancias de la competición así lo exijan y/o cuando con dicho formato pueda existir una mayor riqueza competitiva y se ofrezca mayor valor a la competición", se dice expresamente para, a continuación, recordar que la Asamblea General puede acordar "otro modelo de competición" distinto del anterior, evolución del actual, en el que cada campaña compiten 40 equipos, de los que cuatro proceden de la Segunda División (la hasta esta temporada conocida como LaLIga SmartBank), 10 de la Segunda Federación y 26 ya estaban en la categoría el curso anterior. Es más, la RFEF se refiere así a la composición del lote por el que los interesados pueden presentar ofertas desde este miércoles y hasta el 24 de mayo: "Todos los partidos en directo de cada jornada correspondiente a la Primera Federación incluido el 'play-off' de ascenso de la Primera Federación a la Segunda División o el modelo competitivo de ascenso que lo sustituya".

Así, de entrada, la RFEF ya deja entrever que de cara a la 2023/24 cabe alterar el sistema de competición, dividir los actuales dos grupos en cuatro subgrupos y, con ello, acortar la fase regular. Se trata de una modalidad de competición muy similar a la que puso en marcha en la 2020/21 en el tercer escalón del fútbol español, como paso previo al nacimiento de la Primera Federación.

Ahora bien, las modificaciones (consensuadas con los clubes en la correspondiente Asamblea, aunque sea por 'la vía del artículo 33') pueden no agotarse ahí. Es más, de todos es conocido el ánimo de los dirigentes federativos de que a medio plazo (para la campaña 2024/25, como pronto) la categoría esté compuesta por un solo grupo integrado por de 20 a 22 conjuntos, pues entienden que esa sería una forma rápida de hacerla más atractiva (y con ello más rentable para los agentes implicados). Huelga decir que, como siempre, a las reacciones negativas de los clubes responderá inicialmente la RFEF con la tradicional amenaza de regresar al modelo de la extinta Segunda B.