ALICANTE. El debate sobre la necesidad de inversiones en infraestructuras de la provincia de Alicante vuelve a resonar en el Congreso a cuenta de una Proposición No de Ley (PNL) promovida por el Partido Popular (PP) debatida este martes en la comisión de Transportes y Medio Ambiente. La iniciativa buscaba la adopción de un acuerdo político con el propósito de reivindicar e impulsar la ejecución de tres proyectos concretos.
El primero, la construcción de la segunda pista en el aeropuerto Miguel Hernández de Alicante-Elche para atender el incremento del tráfico de pasajeros. El segundo, la licitación del proyecto de construcción del tercer carril la A-70 entre el túnel de Sant Joan d'Alacant y el aeropuerto provincial antes de que termine 2024, así como la liberalización del peaje de la AP7 entre El Campello y Monforte del Cid (ahora en fase de pruebas hasta el próximo febrero). Y el tercero, la incorporación de una partida específica en los presupuestos generales de 2025 para la modernización de la Línea C-1 de cercanías entre Alicante y Murcia y la ejecución de la denominada Variante de Torrellano, con un trazado por el interior, que procure la retirada de las vías en primera línea del litoral en el sur de Alicante.
Solo los dos últimos puntos han quedado aprobados, gracias a los votos a favor de los representantes del PP y de Vox y la abstención de los diputados de PSOE y Compromís-Sumar, en el primer caso, y al respaldo de PP, Vox y Compromís-Sumar respecto al segundo, con la abstención del PSOE, según confirman fuentes consultadas.
Por su parte, el primer punto, relacionado con la construcción de la segunda pista de El Altet, ha sumado los votos en contra de los dos partidos aliados en el Gobierno central, con lo que ha quedado desestimado. Lo cierto es que la posición de socialistas y de la confluencia participada por Compromís no es novedosa. En primer término, los representantes del PSOE, vienen defendiendo que se sigue trabajando en la planificación a futuro del nuevo documento DORA en el que se incluirán posibilidades para situar esa segunda pista que se considera que todavía no resulta necesaria a corto plazo, en la medida en que la terminal todavía tendría capacidad para absorber nuevos tráficos.
Además, se añade el argumento adicional de que las aerolíneas no habrían demandado su construcción, como ha venido sosteniendo el ministro de Transportes, Óscar Puente, hasta ahora. Entre tanto, según se ha anunciado hasta ahora, se pretende poner en marcha un proyecto para la ampliación de la terminal con el fin de que pueda disponer de capacidad para tratar hasta 26 millones de pasajeros al año.
Por parte de Compromís-Sumar, los motivos de su rechazo a la construcción de esa segunda pista también son conocidos: sus dirigentes sostienen que ese proyecto resulta nocivo para la biodiversidad de Aguamarga, al afectar a su humedal, y que vulnera el derecho urbanístico de Elche. Al tiempo, sostienen que supondría "saturar turísticamente todavía más la provincia de Alicante", según fuentes consultadas. Además, Compromís-Sumar habría justificado su abstención respecto al tercer carril de la A-70 al sostener que ese proyecto no quedaría ajustado a las reivindicaciones de los vecinos de Villafranqueza.
Sea como fuere, el diputado del PP César Sánchez se ha referido al resultado de la votación de los tres puntos para lamentar "profundamente que tanto PSOE como Compromís hayan votado en contra de iniciar los trámites para la licitación del proyecto de la segunda pista del aeropuerto antes de que finalice 2024, máxime cuando se trata del quinto aeropuerto más importante de España en tráfico de pasajeros". "Nos están limitando su capacidad de crecimiento y poniendo en riesgo según informes, 800 millones de euros de impacto en la provincia y casi 15.000 empleos", ha añadido Sánchez.
El también portavoz de Medio Ambiente ha criticado "que Pedro Sánchez ha sumido a Alicante en el abandono" y exige que se acabe "con los agravios históricos que han dejado a la provincia a la cola en inversión". Sostiene que fortalecer las infraestructuras de la región es "un buen negocio para España". "Cada euro que se invierte tiene una rentabilidad mayor que la media nacional, por ejemplo, en Alicante cada metro cúbico de agua tiene una rentabilidad de 10,5 euros, cuando la media nacional tiene una rentabilidad que no llega a los tres euros por metro cúbico", ha explicado.
Así, el PP ha exigido financiación para realizar "las inversiones e infraestructuras pendientes, para financiar servicios públicos, la seguridad y para hacer frente a los desafíos que plantea la inmigración". "Lo que pedimos es una financiación justa, que permita que el puerto de la ciudad de Alicante se abra al mundo y que el aeropuerto funcione al máximo. Los alicantinos estamos preparados para ser un referente en el Mediterráneo, pero necesitamos apoyo y acabar con la injustica de la que son cómplices con su silencio los diputados socialistas alicantinos en el Congreso", ha explicado Sánchez.