ALICANTE. Contrariado por el partido de los suyos y el resultado cosechado. Así parecía Lluís Planagumà en la sala de prensa del José Rico Pérez minutos después de finalizar el encuentro ante el Alcoyano.
El preparador calificaba como "extraño" el empate: "Hemos hecho todo lo necesario para ganar: teniendo el balón generado ocasiones, tanto con once como con diez jugadores hemos ido a por el partido pero no ha habido forma", ampliaba el técnico que más allá de un "ha habido una indecisión inicial (...) es un balón dividido, Pablo ha ido con todo", no quiso pronunciarse sobre la acción de la expulsión de su futbolista y al ser informado de que su homólogo en el banquillo rival, Mario Barrera, instantes antes, en el mismo lugar, había apuntado que Miguel Ángel Nieto tenía cuatro tacos clavados en el costado zanjaba el tema con un "no he visto desnudo a Nieto".
El número de obstáculos al que se enfrentó el Hércules no se agotaba en la expulsión de Pablo Íñiguez y es que Planagumà desvelaba que Jona se había lesionado "durante el calentamiento" en la banda, lo que había llevado a que jugara Chechu, algo que confesaba que "no estaba previsto". Volviendo con el delantero malacitano, el entrenador blanquiazul hablaba de molestias y de la necesidad de practicarle pruebas.
El técnico barcelonés, que dejaba entrever que ante el Ejea será Álvaro Pérez el elegido ante la ausencia de Íñiguez, no daba por perdida la primera plaza si el Baleares sumaba los tres puntos este domingo, insistiendo en el mensaje de los últimos meses y que los jugadores repiten con insistencia: "Primero es clasificarse para el 'play-off', luego pelear el liderato".