Adiós definitivo a la histórica nave de Reebok en Elche: empieza el derribo con un plazo de dos meses

ELCHE. Ya ha empezado la cuenta atrás para que la nave de Reebok, anteriormente fábrica de Miguel Hernández, sea historia. El emblemático inmueble ubicado en El Pla, patrimonio industrial y un lugar que muchos vecinos de la ciudad recuerdan por el vínculo laboral en alguna de sus distintas etapas, tendrá que estar derribado en dos meses. Lo que no es óbice para que no finalice antes, pero la licencia de demolición otorgada por el Ayuntamiento tiene ese plazo de ejecución. Después será el turno de la urbanización del solar para la futura construcción del Mercadona.

Este jueves los trabajos tenían lugar en uno de los laterales de la misma, donde varios de los vecinos se quedaban grabando el derribo o recordando momentos vividos; "es mítica, ¿eh?", decía alguno, ya que ha sido una nave que ha formado parte de la memoria colectiva no solo por el vínculo laboral de muchos, también por esa imponencia frente a otras fábricas de la zona y el hecho de haber sido sede de la multinacional. En cualquier caso, un camino que empieza a despejarse y que se inició a finales de 2020, cuando los propietarios de la parcela y exdueños de la insigne compañía, los Borja —del industrial Francisco Borja, actual presidente del Patronato del Misteri y expresidente del Elche CF o de otras firmas como Kelme—, junto a otra de la familia, Jatolex, y Bieniten —del propietario de MOR Gestiones Financieras— presentaron a través de Promociones Gavair un Plan de Reforma Interior (PRI) para modificar los volúmenes de la plaza y construir una gran superficie comercial que finalmente ha sido otro establecimiento de la cadena de supermercados. Sobre el forjado de la misma se edificarán los futuros pisos.

Como ha venido contando este medio, el proyecto entre Antonio Machado, Vicente Alonso Pérez, Julio Sánchez Gómez y Doctor Sapena supone la demolición del inmueblepara construir un Mercadona y cuatro bloques de viviendas, habilitando además una zona verde con un pequeño quiosco gastronómico. Para la superficie comercial se destinarán 4.770 m², para viviendas 13.620,20 m², una zona verde de 1.614 m² y una ampliación de viario para tránsito peatonal de 530,40 m². El plazo para urbanizar la misma será de seis meses, y el coste de  406.099 euros. Los edificios darán a la calle Antonio Machado y según explicó en su momento el portavoz de la Junta Héctor Díez, se levantarán sobre la  nave de Mercadona, cuyo forjado estará preparado para la futura construcción de los inmuebles. En ese aspecto, Gavair, la firma fundada por Borja, puede levantar  cuatro bloques con hasta 140 viviendas, para lo que se ha calculado una inversión de 20 millones de euros. 

Reebok y fábrica de Miguel Hernández

Con anterioridad, el edificio fue sobre todo conocido por ser la fábrica de Miguel Hernández en los años 60. En la etapa en la que como ya se ha venido recordando al calor de sus recientes memorias,  pasó de una plantilla de 10 a 1.000 trabajadores gracias a la oferta de un millón de dólares anual que le hizo la norteamericana Caressa en 1966 para comprar toda su producción y trabajar para ellos en exclusiva.  La compañía adquirió la mitad de la compañía del marqués de Carrús,  que acabó con una plantilla de más de mil trabajadores en sus varias  fábricas, llegando a producir 10.000 pares al día. Durante la etapa de  Reebok, la nave albergaba el antiguo centro logístico y oficinas de  Reebok, aunque también se llegaron a fabricar varios modelos de la  marca. En 2009, Adidas, propietaria de la marca, decidió trasladar el  almacén a Zaragoza, lo que propició el cierre de una nave que hasta hace  escasos días, había estado sin uso, como una suerte de reliquia  industrial (y patrimonial en ese ámbito) como el de otras fábricas del  entorno. Eso sí, mucho más imponente. En algún momento de 2023 será un  Mercadona. Y más adelante, un nuevo residencial con hasta 140 viviendas.