ELCHE. Desde este mes de enero está en consulta pública el documento de la modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para incluir en el catálogo de protecciones los Baños Árabes de la Vila Murada, es decir, los del Mercado Central, y los refugios 3B y 3C de la Guerra Civil, también del mercado. En el proceso, el colectivo Margalló, que está dentro de la plataforma Salvem el Mercat, ha recordado que los baños, que datan del siglo XI, aún tienen una parte pendiente por excavar: la leñera. Es por esto que el colectivo pide que se aclare si se va a realizar dicha cata, ya que procedería proteger todo el conjunto, consideran.
Es por esto que en el escrito remitido se solicita aclaración a si el proceso de declaración de Bien de Relevancia Local (BRL) se hace sobre los bienes exhumados o sobre la totalidad del edificio a declarar. En la documentación presentada para la modificación del Plan General y la inclusión de las fichas de sendos elementos se hace referencia a los baños árabes exhumados, "sin embargo, quedó constancia en los informes de las diversas excavaciones arqueológicas realizadas, que quedaban estancias de los baños pendientes de excavar y sacar a la luz. Dichas estancias, al menos las conocidas (la leñera) forman parte de lo que en su día fueron los baños árabes, quedando en consecuencia incompleto el edificio que ahora se pretende proteger", defienden.
Apuntan que tampoco ha sido excavada ni debidamente reseñada la zona de la caldera —que debe incluir el horno, la caldera y la leñera—, pero también parte de la sala caliente y de la sala templada, parte de los muros perimetrales, en especial los orientados al N, al E y al S, parte del vestíbulo y la entrada. "En consecuencia la excavación arqueológica está inconclusa, afectando de forma directa a un bien cuyos restos podrían ser exhumados totalmente". Por ello el colectivo propone que la declaración BRL las incluya, "en especial la caldera y la entrada, partes fundamentales del edificio".
Estiman que este proceso de ratificación de la protección ha de suponer el compromiso municipal de continuar hasta su finalización la investigación arqueológica emprendida en su día por Aparcisa, aún hoy adjudicataria del proyecto. Piden que sea en este mandato para que "el valor histórico, social e incluso turístico que el monumento puede aportar a la plaza, contribuya a su puesta en valor y a la recuperación de un espacio emblemático, cuya normalización es urgente". En el caso de que la protección solo afecte a la parte exhumada, plantean al Ayuntamiento una serie de consideraciones, como si es suficiente la figura de protección que ahora se plantea y cuál es la intervención adecuada, entre otros.
En cualquier caso, si bien desde el equipo de gobierno, el propio alcalde aseveró que se haría la pequeña intervención pendiente cuando anunció por primera vez la protección de estos elementos a través del Plan General, en los últimos tiempos no se ha aclarado si se hará o no. Con todo, hay que tener en cuenta que aunque es el Consistorio el propietario del suelo y el promotor de la obra, el adjudicatario del proyecto es aún Aparcisa, por lo que habría que esperar a la rescisión del contrato, si fructifica, para operar sobre el terreno.
Y otra cuestión también a tener en cuenta es que a priori en algún momento de este trimestre se impulsará el concurso de ideas sobre el entorno del mercado para su futuro. Ya se está trabajando en las bases de cómo será ese concurso, y si el Ayuntamiento no especifica o delimita qué quiere para esa zona, o cómo, este tipo de cuestiones, como la de la cata de los Baños y otras referentes a la zona, quedarán supeditadas a ese concurso. Los últimos que se realizaron en la ciudad no llegaron a materializarse, como el de la noria en época de Alejandro Soler o el Auditorio de Jayton —hoy Palacio de Congresos, en la teoría—, también en su Ejecutivo.
Con todo, en el informe municipal deja una puerta abierta a esa posible intervención, ya que todos los informes de la excavación de Aparcisa explican que aún no está finalizada: "Se establece un área de protección correspondiente al área del perímetro de las fachadas de las edificaciones existentes y 8 metros en dirección este hacía el Mercado Central, paralela al muro de este de los baños. Esta área tiene un carácter provisional hasta no queden completados el resto de trabajos arqueológicos previstos en la zona".
Como recoge la memoria, la Dirección General de Patrimonio Artístico de la Conselleria de Cultura, Educación y Ciencia debería conservarse como yacimiento-museo, anexo complementario al edificio del Mercado Central, posibilitando su visita. El estado de los mismos se considera aceptable, aunque se debe actuar de forma urgente dado su alta relevancia patrimonial. Como explicaron expertas en la materia, de seguir a la intemperie varios años más pueden suponer riesgo de derrumbarse.