La exconcejal de Guanyar, Nerea Belmonte, en el pleno. Foto: PEPE OLIVARESALICANTE. Nera Belmonte echa un capote a su exformación política en el debate sobre la celebración de festejos taurinos en Alicante. La edil no adscrita, expulsada de las filas de Guanyar en marzo de 2016 por una pérdida de confianza, se mostró partidaria este lunes de promover la convocatoria de una consulta popular con resultado vinculante "para que sea la ciudadanía la que decida si quiere que en Alicante se celebren o no espectáculos taurinos". Su posición sobre la nueva ordenanza de Tenencia, Bienestar y Protección de los Animales -en la que se prohíbe cualquier espectáculo que implique maltrato y se suprime la excepcionalidad para las corridas, instaurada en la ordenanza del año 2000 -podría depender de esa hipotética votación. "Soy antitaurina, pero como concejal no me atrevería a prohibir los toros sin conocer cuál es la opinión de los ciudadanos", explicó.
La convocatoria de esa consulta es, precisamente, la línea que mantiene Guanyar, de acuerdo con los compromisos reflejados en su programa político. Fuentes de la agrupación electoral apuntaron a Alicante Plaza que ese plebiscito se podría canalizar a través de una herramienta telemática como "Alicante Decide", que la Concejalía de Participación pretende poner en servicio a través de la página web municipal para que los vecinos puedan expresar su posición sobre diferentes iniciativas. Según las mismas fuentes, bastaría con fijar ciertos criterios como un porcentaje de participación mínima respecto al total del censo de Alicante para que el resultado de la consulta pudiese considerarse válido.
Guanyar plantea que la votación pueda desarrollarse con unos requisitos de participación mínimos a través de la herramienta 'Alicante Decide' cuando se active su funcionamiento en la web municipal
La posibilidad de desarrollar esa votación sobre los festejos taurinos no ha llegado a plantearse todavía formalmente en el seno del equipo de Gobierno, de modo que se desconoce si PSOE y Compromís estarían dispuestos a prestarle apoyo. Sí se ha anticipado ya, no obstante, cuál va a ser la posición de los socialistas sobre la propuesta de ordenanza de Protección Animal: votarán en contra si, entre otros puntos, no se retira la prohibición expresa para los festejos taurinos durante la fase de alegaciones (la nueva norma sólo está aprobada de forma inicial en Junta de Gobierno, tras la abstención de PSOE y Compromís).
El resto de componentes de la oposición -PP, C's y el edil no adscrito Fernando Sepulcre- ya han anunciado públicamente que tampoco apoyarán esa ordenanza si mantiene la prohibición sobre las corridas. Compromís no se ha definido sobre ese punto, aunque sí ha avanzado que también presentarán alegaciones a la propuesta elaborada por la Concejalía de Protección Animal que coordina la edil Marisol Moreno (Guanyar).
El debate sobre los festejos taurinos no se limitará al contenido de esa nueva ordenanza. La decisión clave puede llegar en diciembre: como viene informando este diario, los tres socios del equipo de Gobierno deben concretar entonces cuál va a ser en el futuro el uso de la Plaza de Toros, de propiedad municipal, ya que es entonces cuando vence el contrato de concesión sobre el edificio. El tripartito quedará abocado a conceder una prórroga por la explotación del coso en sus condiciones actuales; a convocar un nuevo concurso modificando o manteniendo sus bases, o asumiendo la explotación de manera directa, lo que conllevará, igualmente, la determinación de su uso.
