ALICANTE. La concesionaria de la autopista de Torrevieja a Cartagena, Ausur (Autopista del Sureste Concesionaria de Autopistas SA), arrojó un resultado extraordinario de 43 millones de euros de beneficio en el ejercicio 2021, aunque no como fruto de su actividad (que no obstante creció también de forma notable) sino por una provechosa operación financiera: la condonación de parte de un préstamo convertible por parte de sus accionistas.
Según las cuentas anuales de la concesionaria correspondientes al pasado ejercicio, la facturación de Ausur creció un 28%, desde los 9 millones de 2020 a los 11,8 millones que ingresó el año pasado. En esta evolución pesa de forma determinante, obviamente, la recuperación de la movilidad en 2021, frente a los varios meses de restricciones que se dieron en 2020 por la pandemia. Así, Ausur disparó su resultado de explotación hasta 4 millones, y la condonación de deuda permitió arrojar el citado beneficio de 43 millones, frente a las pérdidas de 1,9 millones del año anterior.
Como ha contado este diario, Ausur ha conseguido reducir significativamente el importe vivo del préstamo convertible, gracias a la condonación de sus principales accionistas, tras recomprar parte de dicha deuda, y la capitalización de 6 millones el pasado mes de mayo, que ha otorgado una participación minoritaria en su capital al sindicato bancario liderado por el Banco Sabadell. La autopista de Torrevieja fue una de las pocas que evitó el rescate del Ministerio en 2014, gracias a un crédito de cerca de 200 millones concedido por varios bancos.
Los dueños de la concesionaria, Pralesa Concesiones y el murciano Grupo Fuertes, pusieron a la venta Ausur a principios de año, y varios fondos de inversión y empresas del sector (como ACS) se interesaron por ella. Sin embargo, la única oferta vinculante que llegó fue la del fondo neerlandés DIF Capital Partners y Bestinver, pero no llegó a cubrir las aspiraciones de los vendedores, que la rechazaron. En este sentido, la operación se valoraba en unos 200 millones de euros, incluyendo la deuda viva de la concesión.
Hasta ahora, Ausur estaba participada por Pralesa Concesiones, con el 75%, y el murciano Grupo Fuertes (dueño entre otras empresas de El Pozo), con el 25% restante. La entrada del sindicato en el capital de Ausur vuelve a introducir entidades financieras en el accionariado, después de que varios bancos y cajas que habían formado inicialmente parte de la concesionaria la fueran abandonando hace una década. La concesión de Ausur finaliza en 2048, y los bienes que han de revertir al Ministerio de Fomento están valorados en 200 millones de euros.