El edificio del Adda, en el paseo de Campoamor. Foto: AP ALICANTE. El proyecto inmobiliario impulsado por la plataforma especializada en financiación alternativa Fellow Funders en Alicante, que buscaba reconvertir un local comercial cerrado en cuatro lofts turísticos, ha convencido a los inversores. De hecho, en solo unos días el proyecto, House Flipping, ha alcanzado el 100% de la financiación necesaria y ya hay lista de espera.
La iniciativa de la promotora V7Concept, especializada en este tipo de reconversiones, ya había alcanzado un 65% de los fondos (una cantidad en realidad modesta, de 365.000 euros) a principios de la semana pasada, pero tras ser presentado por Fellow Funders a inversores interesados, el 100% se ha logrado en cuestión de horas. El ticket mínimo era de 1.000 euros y el retorno de la inversión llegará en un plazo de 10 meses.
El proyecto tiene la licencia de obra concedida, y la obra ya está en curso. Asimismo, desde que fue seleccionado por la plataforma para formar parte de su nueva línea de real estate, V7 Concept ha reducido el plazo estimado de finalización de las obras y el precio de venta de los lofts resultantes se ha incrementado como consecuencia de la evolución del mercado. Un escenario que, según Fellow Funders, incrementa la rentabilidad esperada, que se movía en el entorno del 15%.
El 'house flipping' de V7Concept se está llevando a cabo en una esquina de la calle Maestro Caballero, colindante con el parque del castillo de San Fernando, y convertirá todo el bajo comercial del inmueble en cuatro viviendas tipo loft de 56 metros cuadrados cada una (compuestas por un salón/comedor/cocina, un dormitorio y un baño), todas ellas exteriores. "Tras la reforma, esta estrategia permite obtener unos activos muy vistosos y radicalmente distintos a los existentes en la actualidad, permitiendo generar rentabilidad para los inversores tras la venta de los mismos", señala Fellow Funders.
El nuevo nicho de mercado del 'house flipping' ha encontrado en Alicante las condiciones que lo subliman. En los últimos dos años, varios bajos en edificios de la capital alicantina, que no encontraban salida con su uso original, se han convertido en viviendas, bien para uso residencial, bien como activo turístico. Un proceso que sigue en la actualidad en barrios próximos al centro.
El proceso no es rápido, ni fácil, y no todos los locales comerciales sin atractivo para el retail son susceptibles de transformarse, pero el modelo ofrece una alta rentabilidad a los inversores. La clave es el acceso independiente de las nuevas viviendas respecto del portal al que pertenecen, lo que permite cumplir la normativa municipal y agilizar la obtención de la licencia turística.
