ELS POBLETS. El Ayuntamiento de Els Poblets ha iniciado los trabajos de restauración de la fachada de la iglesia de San José, una de las dos que existen en el término municipal. San José está en la zona de Miraflor y es del siglo XVIII, aunque la fachada del templo es modernista popular, del año 1920, por lo que hace poco cumplió cien años.
En Els Poblets hay otro templo, el de El Diví Salvador que está en Mirarrosa. La actuación pretende acabar con las humedades que sufre la parroquia desde hace más de 40 años. En el interior del templo se aprecian desconches y humedades en varias zonas de las paredes y en la propia fachada también hay daños y ha ido cayendo algunos cascotes en estas últimas décadas, como ha precisado la alcaldesa de Els Poblets, Carolina Vives.
La primera edil ha precisado que llevan años gestionando para lograr una ayuda para “mejorar este monumento”. “La ayuda es de la Diputación de Alicante y aunque es de 10.100 euros nos sirve para reformar la fachada y acabar con las filtraciones que se producen en su interior. Más adelante, ya actuaremos dentro del templo”, ha indicado Vives.
La alcaldesa ha recordado que esta iglesia es de titularidad municipal, por lo que por este motivo desde el gobierno local se llevan años buscando ayudas que se adaptaran a este tipo de inmuebles. Ahora, los operarios ya han comenzado los trabajos y darán “tres capas de pintura a la fachada, con el fin de acabar con las humedades en el interior”.
Un operario en una grúa, realizando trabajos en la fachada del templo.
Pero antes, se está limpiando a fondo toda la superficie y se repararan algunos daños que hay en la fachada, de algunos pequeños desprendimientos que se han ido produciendo en las últimas décadas. “Se taparán estos pequeños agujeros, se dará una capa de un material aislante y después las tres capas de pintura”, ha precisado la primera edil. Vives ha explicado que este templo se levantó, según la memoria que se redactó para solicitar la ayuda, en el siglo XVIII y que ocupa una superficie de unos 170 metros. El templo está compuesto por la capilla, donde caben unos 60 fieles, además de una sacristía y un pequeño baño.
La fachada es modernista, según el mismo documento, y se construyó en 1920. Por tanto, esta parte de la edificación religiosa cumplió un siglo en el año de la pandemia. La primera edil ha explicado que rebasar el siglo de vida el gobierno local ha querido mejorar la fachada, ya que presentaba deficiencias.
Los trabajos están previstos que concluyan antes de un mes. Vives ha remarcado que en este templo no se han llevado a cabo trabajos de calado en décadas: “Sólo se renovaron las tejas de la torre hace 20 años por que estaban en muy mal estado”. Pero pese a esto, las humedades han seguido haciendo daño en el interior, por este motivo se ha actuado en la fachada.
La intención es frenar las filtraciones y buscar nuevas ayudas para restaurar el templo por dentro. Vives ha recordado que en 2019, tras acceder al gobierno se realizaron trabajos de mejora en la iglesia de El Salvador, donde también se trató el exterior con materiales para mejorar el revestimiento y e