ALICANTE. La solución para el entuerto urbanístico de Torre Placia queda otra vez a la espera de autorización del Gobierno central. Tras un recorrido de más de 15 años de proceso judicial, negociaciones y trámites administrativos, el desmontaje, traslado y restauración del monumento seguirá sin poder desarrollarse hasta que el Ministerio de Cultura emita un último informe favorable sobre el proyecto adjudicado a la empresa Estudio Métodos de la Restauración, el pasado octubre.
Fuentes municipales precisaron que el gabinete que coordina José Manuel Rodríguez Uribes debe evaluar ahora la propuesta técnica de ejecución de ese traslado con el propósito de confirmar que en esos trabajos se garantiza la conservación del baluarte, ya que se trata de un edificio reconocido como Bien de Interés Cultural (BIC), como parte del conjunto histórico de las llamadas Torres de la Huerta.
Lo cierto es que el Consejo de Ministros ya autorizó en marzo de 2017 la posibilidad de que se ejecutase su traslado a un emplazamiento próximo, tras la solicitud presentada por el ayuntamiento casi dos años antes. Con esa petición, se trataba de dar cumplimiento a la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia (TSJCV) en 2014 frente a la anulación de la licencia irregular concedida en el año 2000 para que se construyese una promoción de 40 viviendas que, en parte, invadían su entorno de protección.
En realidad, el fallo del alto tribunal conminaba a derribar las once viviendas del residencial asentadas en ese perímetro de protección. Sin embargo, el ayuntamiento planteó desplazar la torre como solución alternativa con menor coste económico para el interés público, tras alegar había que indemnizar a los propietarios de las viviendas por el perjuicio ocasionado, además de compensarles por el desarraigo social que se les generaría.
El TSJ aceptó esa propuesta alternativa como fórmula de ejecución de sentencia. Y Cultura respaldó el traslado del BIC. Eso sí, supeditó su visto bueno a que se certificase que se mantendría la composición y características del inmueble. Además, debía procurarse que el emplazamiento elegido como nueva ubicación respetase el sentido y función original con los que fue construido. Es decir, que el edificio de Torre Placia continuase integrado en el contexto del conjunto de las torres de la huerta, como elemento defensivo desde el que se debía alertar frente a las incursiones piratas que se producían en los siglos XV y XVI.
La empresa que obtuvo la adjudicación en octubre ha completado las catas para evaluar el estado de la estructura y de sus materiales con el fin de presentar el proyecto de ejecución definitivo
Así, el ministerio avaló que la torre se desplazase unos 400 metros respecto a su ubicación actual, en la calle Campoamor, a un parque de propiedad municipal situado entre las Avenidas Pintor Pérez Gil y Conrado Abaladejo y la calle Juana Francés. Así, el Ayuntamiento cerró un acuerdo de compra con los propietarios de la torre y licitó las obras para su traslado. No obstante, el ministerio debe examinar y validar ahora el proyecto de ejecución elaborado por la empresa adjudicataria de las obras, por un importe de 1,4 millones.
Como informó Alicante Plaza, la propuesta de Estudio Métodos de la Restauración plantea el desmontaje y reconstrucción de la torre pieza a pieza. Desde que asumió el encargo, la empresa ha efectuado las catas necesarias para evaluar la estructura y el estado de los materiales de la torre y, así, poder presentar su proyecto de ejecución definitivo. El trabajo deberá quedar finalizado seis meses después de que se obtenga el beneplácito del ministerio.