ALICANTE. Arranca la segunda oportunidad para adaptar el callejero de Alicante a la Ley de Memoria Histórica. El equipo de Gobierno, compuesto ahora por sólo seis concejales del PSOE tras la ruptura del tripartito, ha convocado este viernes la primera reunión de la comisión para la aplicación de la Ley desde que el juzgado de lo Contencioso número 4 anulase los cambios acordados hace un año, en una sentencia conocida el 3 de noviembre que fallaba a favor del recurso presentado por el PP. El juzgado ya se había respaldado la suspensión de los cambios ejecutados, en respuesta a la solicitud de medidas cautelares presentadas por los populares.
El objetivo de la convocatoria de la comisión no es otro que el de resetear el proceso que llevó a adoptar aquel acuerdo para dar cumplimiento a esa resolución judicial, una vez descartada la posibilidad de recurrirla ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJCV) que el equipo de Gobierno, previa consulta con los servicios jurídicos municipales, había llegado a barajar en un principio.
La propuesta que trata de impulsar la Concejalía de Memoria Histórica, ahora dirigida por el socialista Fernando Marcos, no es comenzar desde cero. Fuentes municipales consultadas precisaron a Alicante Plaza que "hay un trabajo hecho con un listado de 46 calles en los que se han encontrado referencias franquistas" que se seguirá tomando como punto de partida. Eso sí, con la voluntad de llegar al entendimiento político y social, de modo que se pueda plantear un nuevo acuerdo que genere el consenso necesario para que pueda ser aprobado por la mayoría del pleno. Es decir, justo lo que contempla la sentencia, al referirse a la voluntad de concordia como principio inspirador de la Ley de Memoria. Y justo el elemento que, según el fallo, no se tuvo en cuenta al acordar los cambios desde la Junta de Gobierno, sin abrir el debate al conjunto de los representantes políticos elegidos por los ciudadanos.
El equipo de Gobierno se abre a retirar los nombres que no se ajusten a lo previsto en la Ley y está dispuesto a negociar los nuevos rótulos
En realidad, la disputa planteada por PP y Ciudadanos (Cs) sobre ese listado de 46 nombres se circunscribía a menos de una decena de calles que los dos grupos de la oposición consideraban no sujetas a revisión al no referirse estrictamente al periodo histórico de la Dictadura. En esta línea, Memoria Histórica partiría con la disposición de dejar fuera esas vías si se constata que, efectivamente, la Ley de Memoria no les es de aplicación. No obstante, PP y Cs también expresaron su rechazo a algunas de las nuevas denominaciones propuestas para sustituir a esas 46 nomenclaturas al considerarlas, primero, carentes de motivación; segundo, igualmente politizadas; y tercero, hasta cierto punto, planteadas con ánimo revanchista. En ese punto, también podría plantearse una negociación.
Por último, la voluntad del PSOE es que los nuevos nombres también cuenten con el respaldo de los vecinos. Y aunque en la comisión por la aplicación de la Ley estén representadas las Juntas de Distrito, no se descarta la posibilidad de que las denominaciones se sometan al criterio de cada una de ellas en busca de un mayor respaldo social.