ELCHE. Hace unos días se daba a conocer que tanto el Partido Popular como Ciudadanos tenían la intención de registrar oficialmente una propuesta de pleno extraordinario para abordar única y exclusivamente el tema del Mercado Central tras la decisión de parte del equipo de gobierno de rescindir el contrato con Aparcisa. Una acción que se iba a realizar la pasada semana, pero que finalmente sigue sin registrarse por parte de los dos partidos, que intentaron sumar también al Partido de Elche, que sin embargo prefiere mantenerse al margen por lealtad al tripartito, a pesar de que también piensan que la decisión del alcalde es precipitada.
Una fecha que se ha atrasado ya que según el líder de Ciudadanos, David Caballero, ambos partidos, quienes tienen un "acuerdo total" en este asunto, están buscando la fecha más idónea, "hablando con los comerciantes, placeros y vecinos, que también reclaman ese pleno para mostrar la disconformidad", señala Caballero. Por contra, defiende que son fechas en las que los placeros tienen bastante trabajo y quieren "que encaje con su agenda para que puedan venir". Hay que tener en cuenta que a partir del registro, que aún no ha tenido lugar, el primer edil tiene un plazo de 25 días para poder convocarlo, por lo que entre que aún no se ha registrado, y que el plazo es de casi un mes, salvo que se lleve al lunes 17 junto al pleno ordinario, que por el momento no parece que vaya a ser así, irá a enero, como mínimo.
Por su parte, en el seno de los socialistas piensan que no se ha registrado aún porque creen que sendos partidos no saben cómo abordar el asunto y qué tratar exactamente; que se ha planteado en abstracto. En lo que respecta al viejo inmueble, tras la bomba soltada por el alcalde, que cogió a muchos de improvisto, seguirá esperando una llamada de Aparcisa, y si no, entrado el próximo año tendrá que volver a tocar a la puerta del gerente, Álvaro Gordillo, para ver si ha reflexionado sobre el asunto. De momento, la empresa ha respondido claramente con hechos: tras volver a rehabilitar la Plaça de la Fruita después de las catas, se preparan para la siguiente fase de las prospecciones arqueológicas.