ALICANTE. El nuevo presidente de la escuela de negocios alicantina Fundesem, Cayetano Sánchez Butrón, está dispuesto a cumplir al milímetro el acuerdo de refinanciación de la deuda y nuevo alquiler con el Ivace, que ha permitido a la escuela aplazar el pago de 1,2 millones y rebajar la nueva renta a 95.000 euros. Y, por tanto, conservar el uso de la sede, propiedad del Consell. Sánchez Butrón se comprometió verbalmente este martes, tras entregar un pagaré por el primer pago de deuda (de 60.000 euros) a cumplir el acuerdo homologado judicialmente no solo en lo económico (esto es, a no retrasarse en los pagos), sino también en lo que se refiere a la renovación estructural de la escuela.
Como adelantó este diario en exclusiva el pasado 8 de marzo, el acuerdo judicial no solo establecía las cantidades y calendarios de pago, sino que obligaba a Fundesem a renovar sus estatutos, su patronato y la vicepresidencia ejecutiva. El cargo que ocupa todavía Miguel Rosique, que debe abandonarlo antes de que acabe el mes de agosto. Pese a que en un primer momento se lanzaron desde Fundesem mensajes contradictorios (como una entrevista en el diario Información en la que Sánchez Butrón, recién nombrado, explicaba que no veía motivos para la dimisión de Rosique, que fue quien lo propuso para el cargo), este martes el nuevo presidente de la escuela lo dejó meridianamente claro, en presencia del conseller de Economía, Rafa Climent, y la directora del Ivace, Júlia Company. "No esperaremos a que acabe el mes de agosto".
Así, Sánchez Butrón adelantó que Fundesem llevará a cabo la profunda renovación que exige el Consell en el acuerdo, que comenzó con el nuevo patronato que él mismo preside desde el pasado 16 de abril, y que "ya estamos viendo cómo" se releva a Rosique. "Vamos a cumplir el acuerdo", explicó, no solo porque se trate de un contrato homologado en un juzgado y que por tanto obliga, sino también porque el Consell ha mostrado como contrapartida la "generosidad" y el "esfuerzo" de permitir refinanciar la deuda y rebajar el importe del alquiler. Tanto unos como otros, eso sí, fueron lo suficientemente elegantes para desvincular la exigencia de la persona de Rosique, y se esgrimió la necesidad de modernizar "por completo" la escuela para adaptarla a las necesidades actuales de las empresas alicantinas.
Sin embargo, la clave para agilizar la operación no ha estado solo en la existencia de ese acuerdo judicial, sino en la disposición del Consell a exigir su cumplimiento. Si, como esperaba el actual vicepresidente ejecutivo, se hubiera producido un vuelco el pasado 28 de abril, el celo en vigilar de cerca la renovación de Fundesem habría sido probablemente menor. Rosique, como contó este diario, se configuró un patronato afín y convirtió a su consultora Pragma en patrono (además de a Marmol Spain, donde ejerce de interim manager), en espera del resultado electoral. El nombramiento del representante del Consell, Paco Candela, por parte de IFA también ha contribuido a agilizar el 'plan renove'. Los afines a Rosique preferían otro perfil, y se intentó nombrar a la directora general de IFA, Esther Gilabert, a espaldas del patronato de la feria.
Superado el asunto de la deuda y la salida del vicepresidente ejecutivo, el objetivo de Fundesem y del Consell es ahora que la escuela se renueve para volver a ser un elemento dinamizador de la economía provincial. En este sentido, Sánchez Butrón avanzó que "primero vamos a escuchar y luego elaboraremos un plan estratégico" en este sentido. "Vamos a debatir qué queremos que sea Fundesem, y eso será", indicó. Sánchez Butrón consideró que, al tratarse de una organización privada, tiene "más cintura" que las universidades (el abogado es asimismo patrono en Fundeun), lo cual es una ventaja competitiva para poder adaptar su oferta de forma más ágil. "En los cuatro años que voy a estar como presidente, vamos a alinearnos con la demanda".
Climent indicó al respecto que "llevamos cuatro años de gestión intentando hace útil Fundesem, y en este tiempo no han cambiado las cosas", lo que explica la exigencia de renovación. "Si la Administración ha ofrecido unas condiciones ventajosas a Fundesem, necesitamos que haya una reorganización y adaptación a los nuevos tiempos, con un impulso totalmente diferenciado, dinámico y moderno". En esta línea, Sánchez Butrón apostó por crear una oferta formativa muy enfocada a la digitalización y la industrialización, con demanda para formar CEOs, mandos intermedios y empleados. "Este tipo de formación global no existe ni siquiera a nivel nacional, y Fundesem puede aglutinarla, con capacidad para unir, pero hay que lanzarla ya". Y, por supuesto, "insistir en lo que se hace bien, como el MBA internacional".