ELCHE. En septiembre de 2018, el pleno municipal aprobaba aumentar la delimitación de protección del paraje natural municipal Clot de Galvany, lo que suponía empezar todo el trámite para blindar el paraje ante el ladrillo añadiendo 342 hectáreas de protección a las 366 ya existentes, y que supondrán un total de 709 hectáreas. Una reivindicación en la que hicieron hincapié desde distintos colectivos. Ahora, el lento proceso ha pasado otro trámite y ha llegado a la conselleria de Política Territorial.
Hace unos meses, la conselleria de Medio Ambiente requirió al Ayuntamiento el estudio de paisaje sobre este objetivo, ya que el mismo requería la elaboración de una Memoria Descriptiva del Paraje. Desde la concejalía de Medio Ambiente ya se ha elaborado dicho estudio y se ha entregado a la administración valenciana, que para seguir el trámite, ha enviado ahora dicho documento al Servicio de Infraestructura Verde y Paisaje, dependiente de la conselleria de Política Territorial.
En este sentido, aunque el Clot de Galvany está protegido como tal, quedaba hacer lo propio con la zona de amortiguación —término también recogido en la declaración Unesco del Palmeral para 'oxigenar' y preservar la imagen del paisaje—, ya que además es el entorno en el que se encuentran puntos de gran valora ambiental como el Fondet de la Senieta, saladares y lomas de Balsares o la charca de Balsares. Para seguir con el trámite, tras pasar por el servicio de Infraestrutura Verde, habrá que elaborar otro informe técnico para la memoria de la actuación.
Fuera del ámbito natural, también hay patrimonio militar en la zona, como los asentamientos de artillería ligera localizados en las proximidades de la carretera Nacional-332, que según la Ley de Patrimonio de la Generalitat, también son protegibles. De hecho, desde la conselleria de Cultura se planteó la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) del asentamiento militar más conocido en el paraje natural, con los búnkeres que se pueden ver en sus distintos senderos y dentro de una de las lagunas. No obstante correspondería también a Santa Pola.
Por último, y sobre esas nuevas áreas a proteger, el Pativel, ahora en punto muerto tras el recurso aceptado por el juzgado, fijaba como uno de sus objetivos la revalorización y protección del Fondet de la Senieta, del que pone de relieve su falta de protección así como el nivel de degradación que presenta tras décadas de especulación. Es una zona húmeda que no se encuentra incluida dentro del Catálogo de Zonas Húmedas de la Comunidad Valenciana, aunque por sus características podría encontrarse en el apartado de 'Albuferas y marjales litorales'. No obstante, ha sido objeto de especulación urbanística en las últimas décadas y su actual estado de conservación no es el adecuado.
De él señalaba el programa que tiene que ser una parte fundamental de la hipotética y ambiciosa Vía Litoral Alicante-Elche que se planteaba con el Pativel: la concatenación de tres humedales, el Saladar de Agua Amarga, el Criptohumedal de la Senieta y el Clot de Galvany, separados del mar por un extenso cordón dunar, ofrece un alto potencial para su integración como gran parque metropolitano para los municipios de Alicante, Santa Pola y Elche, ya que este paisaje costero se comunica con el interior a través de un sinfín de caminos rurales que penetran en un todavía bello territorio agrícola.