Los representantes del equipo de Gobierno, durante su encuentro con los responsables de Alroa.ALICANTE. El equipo de Gobierno de Alicante, compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), cambia su posición inicial respecto a la sentencia del Juzgado de lo Contencioso número 4 que condena al Ayuntamiento de Alicante a acordar la declaración del Centro Tradicional como Zona Acústica Saturada (ZAS) y sí presentará recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJCV). Así lo ha precisado el alcalde, el popular Luis Barcala, este lunes, tras mantener el encuentro concertado la semana pasada con representantes de la Asociación de Vecinos del Centro Tradicional y con portavoces de la Asociación de Locales de Ocio de Alicante (Alroa).
En el transcurso de esas citas (que se han celebrado por separado, a petición de los residentes), el primer edil ha expuesto a ambas partes que la posición del bipartito no será simplemente asumir el fallo y aplicar la ZAS, como se había asegurado justo el día en el que se dio a conocer la resolución judicial a favor de los vecinos. En su lugar, según el primer edil, se pretende llevar a cabo una doble línea de actuación: comenzar a implementar medidas para reducir el nivel de ruido en el Centro Tradicional y en otros barrios, como el Casco Antiguo, y, al tiempo, recurrir la sentencia, en respuesta a la recomendación formulada por los letrados de la Asesoría Jurídica municipal.
Con todo, según han apuntado representantes del colectivo vecinal, ni Barcala ni ningún otro concejal del equipo de Gobierno entre los que también han participado en la reunión ha llegado a concretar qué tipo de medidas específicas se pretendía aplicar para solucionar el problema de ruido. Tampoco a partir de qué momento comenzarían a aplicarse. "No nos han aclarado si van a reducir horarios de apertura, ni en qué medida, o si van a retirar los veladores a los pubs, que no podrían tenerlos en función de lo que prevé la ordenanza", ha apuntado la presidente de los residentes, Alcazar Moreno. En esta línea, ha señalado que el colectivo seguirá vigilante a las decisiones que se adopten y continuará reclamando soluciones como hasta ahora.
Los responsables de Alroa, por su parte, también han mostrado su contrariedad respecto a la posición anunciada por el equipo de Gobierno al considerar que se pretenden adoptar medidas para iniciar el procedimiento de declaración de ZAS, pese a que se presente el recurso, sin solicitar la suspensión cautelar de la ejecución de la sentencia, según ha precisado su portavoz, Francisco Javier Galdeano. Por ello, ha vuelto a incidir en que, a juicio de la asociación, si se adoptan medidas restrictivas como el adelanto del horario para la retirada de los veladores, "la gente dejará de venir" y, en última instancia, muchos de los locales se verán abocados al cierre.
Por lo pronto, según han informado fuentes municipales a través de un comunicado, el primer edil ha trasladado a vecinos y hosteleros que "el departamento jurídico municipal ha recomendado recurrir la sentencia al discrepar sobre la vulneración de derechos fundamentales" que la sentencia considera probada, "con lo que se presentará el correspondiente recurso en paralelo al inicio de los trámites para crear una Zona Acústicamente Saturada" en el entorno de la calle Castaños.
Según las mismas fuentes, ello implica que "se van a impulsar las medidas de control del ruido, reducción de veladores, control de horarios y suspensión de licencias de pubs en la zona, encaminadas a la implantación de una ZAS; al tiempo que se va a presentar un recurso a la sentencia judicial porque hay cuestiones jurídicas, como la vulneración de los derechos fundamentales, que el Ayuntamiento considera que son matizables". Así, respecto al cambio de postura y el anuncio de ese recurso, Barcala ha apuntado que "lo que se dijo es que se respetaba la sentencia", pero -según ha explicado- se debía analizar su alcance con los Servicios Jurídicos, que han recomendado el recurso "por las consecuencias jurídicas" que tendría la declaración de ZAS. No obstante, ha indicado que el recurso no impide que se vayan a adoptar "medidas correctoras" para encontrar un equilibrio entre el desarrollo de la actividad hostelera y el descanso de los vecinos.
Los vecinos del Centro Tradicional reprochan que no se les haya detallado en qué van a consistir las soluciones que pretenden adoptar para permitir su descanso
En este sentido, ha subrayado que "no es incompatible recurrir la sentencia por los motivos argumentados por los servicios jurídicos municipales y, simultáneamente, adoptar medidas que compatibilicen los intereses de vecinos y empresarios". "Somos conscientes de que hay que adoptar medidas que aseguren la convivencia, y ya trabajábamos en las mismas con independencia de la demanda; por ello, y sin perjuicio de recurrir la sentencia, las aplicaremos", añade el comunicado. Es más, el primer edil ha apuntado que el hecho de que las dos partes -vecinos y hosteleros- puedan pensar que se actúa por las presiones ajenas "puede suponer un buen punto de partida y un indicador de que se trata de encontrar una situación de equilibrio".
Eso sí, Barcala ha señalado que antes de adoptar esa batería de medidas "para corregir la situación que se ha generado" se pretende disponer de datos reales con el fin de poder tomar "decisiones fundamentadas". Así, ha apuntado que se utilizarán nuevas tecnologías para recopilar datos a través de "medidores que nos digan que las decisiones que tomemos son las correctas". También ha señalado que se reordenarán veladores en el eje de la calle Castaños restringiendo superficies, que se aumentarán las distancias entre locales y que se incidirá en la diferenciación entre restauración y ocio. Ha recalcado que a partir de determinadas horas "el ocio no puede estar en la calle, que para eso están los locales" y ha abundado en que los restaurantes tienen sus propios horarios de comidas y de cenas, por lo que "cuando concluyan esas horas, no tiene sentido que los veladores sigan estando a la calle".
En esta línea, el equipo de Gobierno ha manifestado "su intención de hacer extensivas las medidas que compatibilicen el ocio con el descanso a otras zonas de la ciudad, como puede ser el Casco Antiguo, buscando con ellas garantizar unos controles sobre el ruido que permitan la convivencia entre vecinos y hosteleros".
Como ha contado este diario, el Ayuntamiento se enfrenta a un segundo contencioso similar, a instancias de un particular residente en el Casco Antiguo, en el que se podría contar con sentencia en un plazo de un mes. En ese segundo proceso, también se solicita la aplicación de una ZAS en el barrio, además de la nulidad de al menos parte de la modificación del Plan Especial del Casco Antiguo (PECA) aprobada en agosto de 2018.
Los dos encuentros han contado con la asistencia de los concejales de Medio Ambiente, Manuel Villar (PP); Ocupación de la Vía Pública, Manuel Jiménez (PP); Urbanismo, Adrián Santos Pérez (Cs); Seguridad, José Ramón González (PP), y Comercio, Lidia López (PP). La convocatoria de ambas reuniones se produjo un día después de que la asamblea de asociados de Alroa reclamase un encuentro con el alcalde para conminarle a recurrir la sentencia en defensa de los 2.000 empleos del sector del ocio y la restauración que podrían perderse en el caso de que se aplicasen decisiones drásticas como las que podría incluir una ZAS.
