ELCHE. De forma repentina, el equipo de gobierno daba a conocer a principios de septiembre junto a distintos cargos de la conselleria de Educación que iba a clausurar de forma provisional el colegio público Ausiàs march, debido a problemas en la cimentación. Una propuesta que a priori se había anunciado a la comunidad pero que se anunció públicamente tan solo un día antes de empezar el curso escolar. Ahora, la conselleria ha activado los trámites para construir barracones provisionales en el colegio Casablanca al que han ido provisionalmente los alumnos, por un valor de 132.000 euros.
Concretamente, el departamento que dirige Vicent Marzà va a pedir un suministro de aulas prefabricadas de carácter provisional por un valor de 132.762,64 euros. Según se explicó en su día, lo que se va a hacer es instalar dichos barracones en el patio del colegio Casablanca para ubicar al alumnado de Infantil, de cuatro aulas, dando también allí el servicio de comedor. Una actuación para la que aún no hay previstos plazos, y que la conselleria aún no ha comunicado, así como la posible solución que se le vaya a dar al Ausiàs March, que además de los problemas de cimentación, está muy cerca del cauce del río Vinalopó, zona sensible también por las filtraciones de agua que han erosionado su estructura.
Por lo pronto, son 260 alumnos los que han empezado el curso en el colegio de al lado, Casablanca, en el que hay 170 alumnos, y en el que a priori puede que permanezcan allí durante todo el año lectivo. Este disponía de aulas para acoger a los alumnos del Ausiàs March y el Ayuntamiento trasladó allí todo el mobiliario necesario. Se está a la espera de que el servicio de Infraestructuras Educativas de la conselleria determinen qué actuaciones técnicas se pueden desarrollar para subsanar unas deficiencias que vienen de lejos en un colegio que es de 1985 y que como otras infraestructuras en la ciudad, sufre problemas relevantes por el agua. En cualquier caso, se habían detectado en revisiones los problemas en primavera y posteriormente en verano de forma más profunda, lo que abre la cuestión de si se pudo actuar antes y no con la vuelta a las aulas en ciernes.
Un problema que supuso un borrón en la 'normalidad' que el equipo de gobierno destacó en el inicio de curso y que la oposición se afanó en criticar ante la falta de información y encontrarse la situación de un día para otro. Por otra parte, no son los únicos barracones que se han tenido que instalar de urgencia en el municipio. Aunque se han ido eliminando en las pedanías gracias a la inversión del Plan Edificant sobre todo de esta legislatura, la promesa de "liberar" la ciudad de barracones se ha encontrado con la realidad de la gestión diaria y alternativas pragmáticas de cara a soluciones de largo plazo. Además de estas nuevas aulas prefabricadas, también se han implementado en La Paz de Torrellano mientras finaliza el proceso de adjudicación para construir el nuevo inmueble.