ALICANTE. La histórica constructora alicantina Ecisa ha completado la operación societaria para pasar a estar controlada definitivamente por el holding catarí Al Alfia, que entró en la firma fundada por la familia Peláez hace medio siglo a finales de 2014. Como estaba previsto, con los últimos movimientos accionariales la empresa vinculada a la familia real del emirato se hace con el 76% de la constructora alicantina, y la familia fundadora retiene un 24% a través de su sociedad de cabecera, Ecisa Corporación Empresarial.
El nuevo reparto accionarial ha salido a la luz este miércoles con la renuncia de Enrique Peláez, uno de los tres herederos del fundador de la empresa, Manuel Peláez Castillo, que ha decidido abandonar no solo su cargo directivo en la firma sino también su porcentaje accionarial. El 24% de los Peláez, a través de la corporación, queda en manos del hermano mayor y expresidente, Manuel Peláez Robles, toda vez que Javier Peláez ya abandonó la empresa hace tres años para centrarse en su carrera como cantante.
La salida de Enrique Peláez de la empresa, para según explicó este miércoles en un comunicado centrarse en "nuevos horizontes profesionales", viene a culminar el progresivo distanciamiento de los hermanos de la primera línea de la empresa. Manuel Peláez Robles seguirá representando los intereses de la familia con el 24% del accionariado, pero alejado también de la dirección ejecutiva. El pasado mes de junio, el primogénito del fundador abandonó la presidencia de la empresa por prescripción médica y se convirtió en consejero de la firma.
La culminación del relevo llega al final del año en el que Ecisa está celebrando su 50 aniversario, y después de que en 2018 Al Alfia y los Peláez cerrasen el acuerdo para traspasar a su socio la mayoría accionarial. La firma catarí se hizo con el 76% del capital realmente el año pasado, al capitalizar el préstamo de 14 millones concedido en 2014 y suscribir una ampliación de capital por otros 2,8 millones. Oficialmente, el nuevo reparto accionarial aún no se había registrado por cuestiones burocráticas, pero estaba previsto que se oficializase en el segundo semestre.
El contexto para la constructora alicantina, uno de los máximos exponentes del sector, es también el de un cambio de ciclo y de modelo de negocio, más allá de la operación societaria. Como ha venido contando Alicante Plaza, Ecisa cerró 2018 con una caída del negocio hasta los 83 millones y pérdidas de 23 millones, que fueron cubiertas con aportaciones de los socios para mantener intactos los fondos propios. El ejercicio 2018 estuvo muy condicionado por la salida de Chile, que supone aproximadamente el 60% de las pérdidas registradas, mientras que el resto se atribuye al incremento de los costes directos en la construcción residencial entre mediados de 2016 y 2018. Unos impactos que ya no afectarán a las cuentas de 2019, año en el que Ecisa espera facturar 100 millones.
Enrique Peláez inició su actividad profesional en Ecisa en 2002 en el departamento de contratación. Durante 18 años ha conseguido un volumen de contratos de 1.500 millones de euros para la compañía, además de ser el ejecutivo que lideró junto a su hermano la internacionalización de la empresa, con presencia en más de 10 países. Durante más de 10 años ha sido miembro del consejo de administración y, hasta hace poco, vicepresidente del consejo. Ahora ha decidido iniciar nuevos proyectos profesionales en los campos de la formación, consultoría y asesoramiento empresarial.
Al Alfia agradeció en un comunicado el trabajo de Enrique Peláez, y reiteró su compromiso con el futuro de la empresa (a la que la familia Peláez seguirá vinculada a través de su hermano Manuel), incluida una nueva línea de financiación internacional que se estrenará en febrero, por importe de 10 millones de euros, "que servirá para ampliar nuestras líneas de confirming y financiación a corto plazo".
Por su parte, Ecisa fichó en octubre al ejecutivo Enrique Barreiro como nuevo presidente y consejero delegado en sustitución de Manuel Peláez, tras una breve transición. Se trata de un perfil profesional con experiencia, dilatado conocimiento en el sector y trayectoria en importantes empresas a nivel nacional e internacional. El objetivo es facilitar la nueva estrategia, centrada en la reorganización de la compañía con un modelo de negocio que incluye acciones de lanzamiento al mercado, gestión de riesgos, planificación y eficiencia en costes. El objetivo final es crear un marco para la sostenibilidad y el crecimiento de la empresa.