ALICANTE. La agrupación de Podemos en Alicante queda sujeta al nombramiento de una dirección provisional tras la dimisión de los miembros de su consejo de coordinación, comunicada el pasado viernes. La situación de vacío de poder generada por la renuncia en bloque de todos los miembros de esa ejecutiva que todavía se mantenían en sus cargos conllevará la designación de un equipo técnico -el equivalente a una dirección gestora- que asuma funciones organizativas hasta que pueda convocarse una asamblea encargada de elegir a los nuevos dirigentes.
De este modo, se reproducirá el esquema que ya se ha generado en el escenario autonómico, después de que, el pasado junio, se produjese la dimisión de Pilar Lima como coordinadora junto al resto de componentes del Consell de Coordinació, como consecuencia de los resultados obtenidos en las elecciones autonómicas del pasado 28 de mayo, en las que Podem se quedó sin representación en les Corts.
Desde entonces, la estructura autonómica queda pilotada por otra gestora en la que figuran representantes alicantinos como María Teresa Pérez, quien ha venido ejerciendo como directora general del Injuve durante la pasada legislatura, o Carmen Villaverde, quien ha asumido responsabilidades como secretaria de Comunicación, entre otros.
¿A quién corresponde ahora la designación del nuevo equipo técnico encargado de dirigir el partido en Alicante? De acuerdo con los documentos de organización interna de Podemos, se trata de una competencia reservada a la dirección nacional, en Madrid, bajo la dirección de la exministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, que por ahora no habría comunicado ninguna decisión al respecto. En principio, todo parece indicar que podría adoptarse algún tipo de acuerdo en los próximos días, una vez despejada la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno y de que se haya completado la composición del nuevo ejecutivo central, que cuenta con el respaldo de Podemos a través de su incorporación a Sumar (aunque no esté representado con ministros propios).
En todo caso, las funciones del equipo técnico en el que se delegue la gestión del partido en Alicante tendrán una duración limitada. Fuentes consultadas precisaron que se espera que pueda convocarse en breve la asamblea autonómica para elegir a un nuevo Consell de Coordinació, lo que permitirá que, después, se convoque la asamblea en el ámbito municipal con el mismo fin respecto al consejo local. Con todo, no ha trascendido todavía ningún calendario definitivo sobre las fechas para el desarrollo de esas dos citas.
Entre tanto, la agrupación local del partido permanece con un perfil bajo, sin apenas presencia pública en los grandes debates municipales desde la celebración de las elecciones del 28 de mayo y, sobre todo, desde los comicios generales de julio, en contraste con el activismo que mantuvo especialmente desde la gestación del partido en 2015. De hecho, en las municipales de ese año, el respaldo externo de Podemos a la plataforma electoral Guanyar Alacant permitió que esa candidatura alcanzase hasta seis concejales en la corporación.
En la cita de 2019, Podemos concurrió en confluencia junto a Esquerra Unida (entre otras fuerzas políticas) y logró dos concejales. En las últimas elecciones de mayo, se reeditó ese pacto (esta vez con una lista encabezada por el coordinador local de Esquerra Unida, Manolo Copé, en virtud del acuerdo negociado entre las direcciones regionales de las dos fuerzas) y obtuvo un único representante en un contexto sociopolíticos distinto al de las dos citas electorales precedentes. Con todo, a pesar de ese acuerdo de confluencia, no se habría constatado hasta ahora una constante en Podemos por lo que respecta a su participación de las reuniones de coordinación del grupo municipal de Esquerra Unida Podem.