ALICANTE. Resuelto por adelantado y para mal el asunto de la pelea por el campeonato de grupo, la suerte para el Hércules es que tiene por delante nueve jornadas para recuperar sensaciones, volver a hacer bien las muchas cosas que hacía así en la primera vuelta y, por extensión, mejorar su posición clasificatoria... toda vez que no es lo mismo disputar el 'play-off' de ascenso tras acabar la fase regular como segundo o tercer clasificado que hacerlo tras cerrarla en cuarto o quinto lugar.
Después de sumar solo ocho de los 24 puntos puestos en juego en una segunda vuelta que arrancaron como líderes, el desplome del equipo es indudable y no reside solo en la falta de acierto en la portería contraria. Por mucho que se empeña el técnico Rubén Torrecilla, su equipo solo remató entre los tres palos de la meta contraria en una ocasión ante el Europa, un rival directo al que se medía como local. Es verdad que la madera escupió un buen disparo de 'Samu' Vázquez poco después de verse perjudicados por un error arbitral, pero el contrario tiró las mismas veces que los blanquiazules a puerta (bien lo sabe Carlos Abad). El Hércules ha pasado de generar mucho a poco y ahora casi nada. Afortunadamente, este domingo por lo menos mantuvo la portería a cero, algo que solo había hecho una vez en las siete jornadas precedentes de la segunda vuelta, pero con eso (con el primer empate a nada en 25 encuentros ligueros) no le basta ni para pelear el campeonato ni para mejorar su posición en la tabla (en caso de empate a puntos con el Europa a la finalización de la fase regular quedaría por detrás porque el coeficiente particular de goles se lo ha ganado el conjunto barcelonés) ni para pasar de ronda o ganar la final en un 'play-off' de tratarse del encuentro de vuelta, haber finalizado la prórroga con empate y ser su adversario un equipo que finalizó la fase regular en mejor posición (acuérdense de lo sucedido con el Unión Adarve; eso sigue siendo así, aunque las eliminatorias sean a doble partido).
A nueve jornadas para que finalice la fase regular, el Hércules es quinto con 44 puntos. Su principal perseguidor es el Torrent, conjunto que le tiene ganado el coeficiente particular de goles, pero cuenta con siete puntos menos, por lo que las opciones de disputar el 'play-off' son muy elevadas... pero cosa bien distinta es mejorar su posición clasificatoria y alimentar las sensaciones con argumentos futbolísticos. Es necesario recuperar el mucho crédito perdido, para no acabar llegando a la fase de ascenso cómo lo hizo el Hércules en la 2021/22 con Sergio Mora: los paralelismos con ese equipo (que a la finalización de la jornada 25 tenía un punto más que el actual) no paran de crecer. Desde los errores groseros en ambas áreas a la incapacidad para superar a conjuntos de la parte baja y a rivales directos. Hay que desactivar esa bomba de relojería cuanto antes.
Este domingo el entrenador del Hércules, en otra rueda de prensa en la que hacía una análisis alejado de la realidad (cabe esperar que de puertas a dentro su mensaje sea otro), se quejaba del "negativismo" que rodea a su equipo y defendía que "no todo está mal". Se equivocaba también en eso porque no es negativismo, es realismo. Él no lo ha vivido, pero aquí ya sabemos que por el actual camino no se va a ningún sitio.
El conjunto de Rubén Torrecilla ha cerrado la jornada 25 empatado a puntos con el cuarto, el Sant Andreu (con el que tiene igualado el coeficiente particular de goles); a dos más el coeficiente particular de goles del tercero, el Europa; a cuatro del cuarto, al Lleida, al que ganó en la primera vuelta y ha de recibir en la última jornada; y a siete al líder, un Badalona al que ha de visitar en la penúltima fecha de la fase regular. Si se vuelve a ser ese equipo ambicioso, con hambre, que no se asusta (en el arranque de la segunda mitad del choque de este domingo por momentos a los blanquiazules pareció que les temblaban las piernas, le podía la presión), que hace gala de profundidad de banquillo, con soluciones sobre la macha cuando las cosas no funcionan, etc. recuperará el crédito perdido y la confianza en sus opciones de ascenso volverá a ser alta. Hoy está bajo mínimos.