El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, durante su intervención en el pleno del estado de la ciudad. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. Paso al frente de Compromís para terciar en el debate planteado por los grupos políticos que conforman el eje progresista en el Ayuntamiento de Alicante a cuenta de la negociación del presupuesto municipal de 2021, supeditada a la revisión de la propuesta de ordenanza de convivencia cívica. La coalición valencianista ha anunciado este lunes el registro de una moción para su debate en el pleno del próximo jueves 17 de diciembre en la que insta al equipo de Gobierno (el bipartito en situación de minoría compuesto por PP y Cs) a "empezar a trabajar la ordenanza municipal de convivencia cívica de forma conjunta y con la participación de las entidades que trabajan con colectivos y personas vulnerables, dado el rechazo y contestación social" que, según Compromís, "ha generado el texto" aprobado en Junta de Gobierno en su versión preliminar.
El portavoz municipal de Compromís, Natxo Bellido, ha explicado que "hay que dar forma a las peticiones de la mayoría de los grupos municipales, y a las palabras expresadas por el alcalde, para traducir la oferta de diálogo a través de una mesa de trabajo, una comisión municipal en la que tomando como base el modelo de ordenanza de la FEMP, se trabaje el texto para compatibilizar la penalización de las conductas incívicas y la lucha contra las mafias con la protección de las personas y colectivos, como las personas sin hogar o las mujeres prostituidas, que son víctimas de la explotación, y la exclusión social; y que necesitan medidas acordadas y previstas en los programas del Plan de Inclusión Social de Alicante que se está trabajando".
Por su parte, el edil Rafa Mas ha añadido que "en la propuesta que presentamos marcamos la necesaria participación del personal técnico de las áreas de Acción Social e Igualdad para sacar adelante una ordenanza que vaya mucho más allá de las medidas punitivas, que vaya a la raíz de los problemas de exclusión social y que esté coordinada con las políticas municipales de Igualdad y los programas de Acción Social de protección a los colectivos vulnerables que necesitan acompañamiento y recursos especialmente en el apartado de la vivienda".
Por último, Compromís insiste en "la necesidad de aprobar esta moción para poder encarar con mejor voluntad la negociación presupuestaria". Según Bellido, "hay que apartar la piedra del camino que supone la actual propuesta de ordenanza para poder hacer todos un esfuerzo de cara a conseguir mayorías amplias en la aprobación de los presupuestos del año 2021, condicionados por la pandemia y la crisis económica y social que estamos viviendo". A su juicio, "hay que transformar en hechos las palabras del alcalde y la voluntad expresada por Cs de abrirse a negociar un proyecto de ordenanza que afecta la convivencia de la ciudadanía alicantina".
La propuesta se plantea un día antes de que el bipartito reanude los contactos sobre el presupuesto con Compromís y Unides Podem
Así, ha considerado "que es necesario para poder sacar adelante una buena propuesta que dé soluciones sin estigmatizar, y es básico para actuar con responsabilidad y voluntad de acuerdo en la negociación presupuestaria. Compromís ofrece diálogo y soluciones a la actual situación de bloqueo que esperamos que puedan ser secundadas por el gobierno municipal y el resto de la oposición progresista", ha concluido.
La propuesta de Compromís se produce antes de que se aborde la votación sobre el presupuesto, todavía sujeta a la ronda de contactos con la oposición. De hecho, PP y Cs prevén retomar esa negociación este miércoles precisamente en sendas reuniones con los representantes de Compromís y Unides Podem, después de que la doble cita celebrada el jueves con PSOE y Vox se cerrase sin avances significativos que permitan allanar la aprobación de las cuentas.
En esos encuentros, los representantes del bipartito reprodujeron la postura adelantada por el alcalde, Luis Barcala, el pasado martes, durante la presentación del borrador del presupuesto, cuando señaló que el equipo de Gobierno estaba dispuesto a abordar cambios en la ordenanza de convivencia cívica, pero sin que ese debate se mezclase con la confección del presupuesto. En esos encuentros, el representante de Cs, José Luis Berenguer, tan solo añadió al respecto que su grupo político tampoco daba por cerrada la redacción de esa ordenanza, todavía sujeta a la admisión de las enmiendas planteadas por los grupos de la oposición. Por su parte, el propio primer edil añadió el miércoles que si el equipo de Gobierno hubiese querido aprobar la ordenanza podría haberla elevado a pleno ya sin esperar a negociarla a la espera de poder contar con el respaldo de Vox.
