ALICANTE. La Cámara de Comercio de Alicante recibirá entre este martes y el miércoles la comunicación oficial de que la CEV ha designado a Miguel Quintanilla como nuevo miembro del pleno, en la cuota de ocho vocales que corresponde a la patronal autonómica y que ha abandonado recientemente la ilicitana Rosana Perán. A partir de ese momento, hay un periodo de quince días para reemplazar a la vicepresidenta de Pikolinos también en el comité ejecutivo, del que formaba parte, pero eso ya queda en manos del pleno de la institución formado por 60 miembros.
Ese es el escenario que ha permitido al vicepresidente primero de la institución, Antonio Arias, y a algunos vocales próximos a la patronal alicantina, Uepal, plantear un 'pulso' a la CEV con el amago de presentar un candidato alternativo a Quintanilla que podría ser precisamente el presidente de esta última organización, Juan José Sellés. Si bien el empresario alicantino aún no ha desvelado sus intenciones (aunque es conocido que se mueve bien en los ambientes a la contra), en realidad tendría varios días por delante para dar el paso, dado que hasta el mismo día de la votación puede presentarse.
Ese es el plazo que tienen ambas partes para llegar a un acuerdo que permita completar el comité sin llegar a votación, algo que en realidad pocos vocales del pleno desean (tampoco el presidente de la institución, Juan Bautista Riera, ajeno a la maniobra liderada por Antonio Arias como ha contado este diario), ya que en la Cámara de Comercio existe una extensa tradición de pactos previos. También es partidario de llegar a un consenso el presidente de CEV Alicante, Perfecto Palacio, pero desde la patronal esperan que sea Riera quien ponga orden en la institución, donde la constatación de que se han convertido en escenario de otro pulso patronal no ha sentado precisamente bien.
"Esto se tiene que arreglar sin ir a la guerra, porque cuando hay una guerra quedan víctimas", señalan fuentes empresariales. El plazo de quince días que dará la Generalitat a la Cámara para completar el comité, en base al reglamento autonómico, debe ser suficiente para sellar ese pacto. Con todo, la institución prefiere no agotar el plazo, que llegaría hasta el 27 o 28 de marzo en función de cuándo reciba la notificación oficial. Con el puente de San José por medio, la fecha más probable para convocar el pleno podría pasar así a los días 20 o 21.
Como desveló este diario el pasado 7 de marzo, el movimiento para armar un candidato alternativo a Quintanilla para entrar en el comité partió de un grupo de miembros de la Cámara liderados por su vicepresidente primero, Antonio Arias. Ni el presidente de la institución ni su vicepresidente segundo, Carlos Baño, estaban al tanto, y se vieron sorprendidos al trascender la maniobra. Varios 'pesos pesados' del pleno, como el presidente de Baleària, Adolfo Utor, o el de Masymas, José Juan Fornés, mostraron su disgusto por volver a poner la institución bajo los focos por cuestiones ajenas a su labor.
El desafío del sector más cercano a Uepal ha congelado los tímidos contactos que se habían producido entre las dos patronales para abordar la posible integración de la alicantina en la autonómica. Si bien dichos contactos no habían llegado a oficializarse, todo indicaba que podían terminar llegando a buen puerto, aunque tras el golpe de mano de Arias y Sellés son muchos los dirigentes de CEV Alicante que apuestan por cerrarles la puerta definitivamente. Una negociación paralela que desactive el 'plan B' en la Cámara a cambio de algún gesto en la integración CEV-Uepal, en los próximos quince días, puede tener la clave.