ALICANTE. La primera plantilla del Elche, los canteranos que trabajan a las órdenes de Eder Sarabia, el resto del 'staff' técnico y directivos compartía este jueves mesa y mantel en Santa Pola.
El grupo hacía piña en el restaurante Vintage, que se ha sumado esta temporada a la nómina de patrocinadores de la entidad. Lo anterior después de una sesión de entrenamiento en el estadio Martínez Valero a la que seguía la tradicional ofrenda a la patrona de la ciudad, a la Virgen de la Asunción.
Precisamente a las puestas de la Basílica de Santa María, el presidente Joaquín Buitrago atendía a los medios para precisar que Christian Bragarnik "no está nervioso" con el arranque de curso.
El máximo mandatario franjiverde se metía a director deportivo al explicar que se ha descartado la incorporación de un tercer portero porque entre los 'parados' no encuentran "a uno que mejore a los metas del futbol base" (el objetivo con la ventana de fichajes cerrada era Diego Mariño, pero firmó por el Granada) y confirmaba que la entidad ha hecho uso del 95% del Límite de Coste de Plantilla Deportiva (inscribible y no incribible) asignado por LaLiga con el objetivo de armar un equipo que tenga como meta "pelear el ascenso".
