BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm ha ideado un nuevo acceso al barrio de Els Tolls: una conexión por carretera que una la calle Francisco Llorca Antón con calle Italia. Una alternativa que daría salida a los vecinos de esta zona que desde hace años usan el camino del Llandero para salir de la ciudad como vía más directa. Pero el proyecto está pendiente de si es viable hacer la tranviarización del Tram entre la parada Intermodal y la estación de FGV en la avenida Beniardá.
Según relata a este diario el concejal de Movilidad, José Ramón González de Zárate, el objetivo es lograr el permiso. Con ello, se conseguiría poner a la misma altura la vía del tren con el bulevar proyectado. Una solución aportada en Beniardá con las obras actuales en su parte superior para los transeúntes. Además, se eliminarían las barreras, sustituyéndose por cruces de semáforo, y por tanto, rebajando el tiempo de espera. Por su parte, fuentes de FGV explicaron que las condiciones de este tramo permitiría la tranviarización.
González de Zárate indicó que el proyecto está presentado a la Agencia Valenciana de Seguridad. Llevan años trabajando en el cambio, en diciembre enviaron la última versión incluyendo la subsanación de deficiencias que se reclamaba por parte de la administración autonómica. Pero cuatro meses después, el Ayuntamiento aún no tiene respuesta.
Una vez se consiguiera nivelar las vías e integrarlas con el resto de la calzada, la idea pasa por crear un vial que conectara el barrio con la zona de la Estación de Autobuses, que en la actualidad están separadas por el paso del Tram. En principio, el coste de todo lo asumiría el Consistorio, una cuestión que lamenta el popular después de que en otras ciudades como Dénia hayan asumido la obra, en coordinación con la administración local. "El PSOE no nos ayuda nada", remarca, haciendo alusión a esta cuestión y que les "alarguen" el tiempo de respuesta. La actuación la consideran "prioritaria" por lo que tienen la disposición de seguir adelante costeándolo con las arcas municipales.
FGV celebra un año de la Intermodal de Benidorm con la tranviarización pendiente
El proyecto permitiría dar una nueva salida, pero es más ambicioso. Según indicó el edil, el objetivo es crear un bulevar paralelo a las vías del tren, abierto al tráfico, y que conectaría la cala con el apeadero de Els Tolls.
Esta conexión se hace más necesaria una vez el municipio ha experimentado el cierre del acceso por la avenida Beniardá y la salida por el Llandero. Un camino que era doble dirección hasta que comenzaron los trabajos de la carretera subterránea. En ese momento se decidió restringir el paso: solo sería de entrada y para aquellos que acrediten ser residentes. Una justificación que se encuentra la previsión de una mayor afluencia por el cierre en Beniardá y las condiciones que presenta el camino. La reversión sigue pendiente, a pesar de que se haya creado una isleta que alerta a los vecinos.