ALICANTE. El Hotel Occidental de Barceló, en López Torregrosa; el Hotel Casa Alberola by Hilton, entre Canalejas y La Explanada; el Hotel Serawa, en la calle San Fernando... Son tres ejemplos de las últimas aperturas de hoteles registradas en la ciudad de Alicante en el plazo de poco más de un año y medio. Se trata, además, de una tendencia que sigue vigente pese a la situación de incertidumbre que ha podido generar la pandemia del coronavirus sobre el sector turístico, en la medida en que se siguen conociendo nuevos proyectos. Entre ellos, el del hotel ya en ejecución junto al edificio institucional del Ayuntamiento, o el previsto por el fondo Vista y la familia Soler en la confluencia de las calles Rafael Altamira y Alberola Romero.
En realidad, la tendencia se ha consolidado a lo largo de las dos últimas décadas en los que la capital ha sumado 13 nuevos establecimientos: es decir, se ha producido un crecimiento del 46% a un promedio aproximado de una apertura cada dos años. En el año 2000, la planta hotelera de la ciudad estaba conformada por 28 hoteles y 4.852 plazas. De ellos, solo uno (el antiguo Hotel Sidi San Juan) disponía de la máxima categoría (5 estrellas), mientras que otros dos eran de cuatro, doce contaban con tres, ocho con dos y cinco con una.
La expansión ha sido sostenida hasta incrementarse en un 46% con un promedio de aproximado de una apertura cada dos años
Esa realidad ha cambiado sustancialmente ahora. No solo por lo que respecta a la cantidad, sino sobre todo también por lo que se refiere a la calidad de la oferta disponible. Veinte años después, cualquier turista que recale en la ciudad puede elegir dónde hospedarse entre 41 establecimientos, según los últimos registros anuales recopilados por la Secretaría Autonómica de Turisme.
Lo cierto es que, como sucedía hace 20 años, solo uno de esos 41 hoteles dispone de cinco estrellas. Se trata del Hotel Amérigo, situado en pleno centro, tras el cierre del Sidi, ahora reconvertido por TM Grupo Inmobiliario en una residencial de lujo. Sin embargo, se han multiplicado los establecimientos de cuatro estrellas: de dos se ha pasado a trece. También han aumentado los de tres (había doce y ahora son diecisiete) en detrimento de los de dos estrellas (que han pasado de ocho a cinco). Los de una se mantienen con cinco establecimientos.
En paralelo, también han crecido los hostales (de 11 a 19) y, sobre todo, los apartamentos turísticos reglados, de los que en el año 2000 solo se tenía registrados 397 con 1.442 plazas y han evolucionado hasta los 3.872 con 17.373 plazas, después de que la Generalitat haya puesto en marcha distintas campañas para acelerar el proceso de su regularización y registro. Eso sí, en ese cómputo, solo figuran 27 apartamentos turísticos en bloque, en los que se oferta un total de 380 habitaciones, según los datos recopilados por el Patronato Municipal de Turismo.
El salto también ha sido cualitativo: se ha pasado de dos a 13 hoteles de cuatro estrellas
Además, la expansión de la oferta hotelera de la ciudad se ha mantenido de manera constante. Basta con evaluar los datos de los establecimientos disponibles hace diez años. En 2010, Alicante sumaba 36 hoteles: dos de cinco estrellas, diez de cuatro, catorce de tres, cinco de dos y cinco de una. En su conjunto, ofertaban 7.022 plazas: una cifra superior de la que se dispone en la actualidad, pese a contar con cinco establecimientos más que entonces. ¿El motivo? Que los hoteles existentes entonces eran de mayor tamaño y, en consecuencia, contaban con más habitaciones.
En cualquier caso, el registro de los hoteles existentes en 2010 supone que en la última década se ha producido un aumento del 13,8%. Y, además, que ese crecimiento fue todavía mayor en el salto de 2000 a 2010: 8 hoteles nuevos, un 28,5% más. En la foto de 2010 también aparece retratada la expansión de los apartamentos turísticos. En ese año, solo se tenía registrados 715 con 2.574 plazas frente a los 3.872 ya citados correspondienes a 2020.