ALICANTE. Los vecinos del Casco Antiguo de Alicante persisten en la exigencia de la aplicación de restricciones a la actividad del ocio y la hostelería contempladas en la propuesta de Zona Acústica Saturada (ZAS) comprometida por el equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), ante la continuidad de los problemas de convivencia que se seguirían registrando prácticamente a diario, según precisan fuentes de la asociación de residentes Laderas del Benacantil. 

"Mientras esperamos la ZAS, prometida por el consistorio según los sonómetros y las pruebas evidentes hace un año, seguimos sufriendo en el Casco Antiguo el no poder descansar. Con el añadido de un verano de tres meses con una hora más en el horario de cierre, hasta las 4.30 todos los días", apunta el presidente del colectivo, Joaquín Gangoso. "No entendemos cómo hay todavía gente que no quiere resolver el problema y mira hacia otro lado; o mejor dicho, no quiere escuchar lo que pasa", apunta, tras referirse a uno de los últimos episodios de denuncia formulados por vecinos de la calle Montegón: una de las encuadradas en las limitaciones recogidas en la propuesta de ZAS, ya aprobada por el equipo de gobierno en Junta Local, aunque todavía sin entrar en vigor en todo su alcance.

"Los vecinos estamos hartos de no poder descansar, no se puede sorportar; música muy alta sin limitador, jaleo en la puerta del local, espectáculo en vivo con micrófono a toda leche, un despropósito", relatan los residentes. "Todo esto hasta las 3:30 de la madrugada más el rato del desalojo…", añaden. En esta línea, exponen que, tras acudir a la Concejalía de Urbanismo, pudieron precisar que el establecimiento en torno al que se habría producido el problema, se constató que dispone de licencia "de café bar con música y sin cocina, con hora de cierre a las 01:30 horas, con 85 decibelios y aforo 23 personas". "Es un despropósito que no hay por dónde cogerlo, está incumpliendo la normativa en todos los sentidos", recalcan los vecinos afectados.

Entre tanto, la plena aplicación de las dos ZAS previstas tanto para el Casco Antiguo como para el Centro Tradicional siguen demoradas a la resolución de las alegaciones registradas tras su aprobación en Junta de Gobierno, con la previsión de que esas observaciones puedan quedar contestadas en cuestión de semanas, según auguró el vicealcalde y edil de Medio Ambiente, Manuel Villar, este martes. Con todo, no llegó a anticipar una posible fecha para que puedan comenzar a aplicarse el conjunto de limitaciones recogidas en la propuesta que, además, podría quedar sujeta a una posible revisión, a partir del acuerdo suscrito con el grupo municipal de Vox que permitió la aprobación del Plan Económico Financiero (PEF) al que el ayuntamiento quedaba abocado tras el incumplimiento de la regla de gasto, al cierre de la liquidación presupuestaria de 2024.