ALICANTE. Las relaciones comerciales entre Alicante y Argelia comienzan a arrojar los primeros síntomas de recuperación tras el fin de la crisis diplomática desencadenada entre España y el estado argelino en 2022, lo que despeja el camino para aprovechar oportunidades y que el Puerto pueda convertirse en un hub real para el intercambio de mercancías con el país norteafricano, como refuerzo del papel histórico que ha venido desempeñando al menos desde principios del siglo XX. Ese es el diagnóstico en el que confluyen los sectores empresariales que conforman la comunidad portuaria -transitarios, consignatarios y operadores de la terminal pública de mercancías de la dársena sur- que quedó desgranado este jueves, en la mesa redonda "Dinámicas actuales en el transporte y la logística" entre Alicante y Argelia organizada por Casa Mediterráneo en el marco de las actividades de la semana dedicada a las relaciones entre las ciudades de Alicante y Orán.
Eso sí, para que ese hub pueda resultar operativo se requiere todavía de dos condiciones básicas. La primera sería la recuperación de una línea especializada en el tráfico de mercancías que disponga de grúa con capacidad para ejecutar labores de carga y descarga de contenedores, como la que operaba hasta hace tres años años, según apuntó el presidente de Ateia-Oltra Alicante (la asociación empresarial que agrupa a los transitarios) y responsable de Arab & International Service, Eugenio López Góngora. Se trata de una línea que resulta esencial para poder mover contenedores, toda vez que el puerto de Orán no dispone de grúas pórtico, "lo que supone una desventaja" para el tráfico de productos entre las dos ciudades.
"Se trata de una carencia que nos debilita", explicó, ya que impide aumentar el tráfico de productos alimentarios, vehículos y sus piezas, material de construcción, productos de higiene personal, productos químicos, café, tabaco o bebidas, entre otras de las mercancías principales que se exportan hasta Argelia desde Alicante, según explicó. "Tenemos cubierto el tráfico de pasajeros y el traslado de mercancías ro-ro, pero nos falta esa pata de la mesa, la que cerraría el círculo para contar con un servicio potente", según insistió. Esa línea de mercancías con capacidad de carga contribuiría a potenciar el tráfico desde Alicante, extendiendo el servicio a Murcia y Castilla La Mancha, aprovechando la agilidad y la eficiencia con la que, según seguró, trabajan los servicios aduaneros y paraduaneros del Puerto, con el consiguiente ahorro de costes y de tiempos. "Tenemos un cierre de barco inferior a cualquier otro puerto: un barco que atraque hoy puede partir mañana, cuando en otros puertos puede tardar tres o cinco días antes de la salida", explicó. Y, además, recalcó que el trayecto desde Alicante hasta Argelia se cubre en 8 horas, por lo que consideró que "el camino más corto y el mejor es el nuestro".
La segunda de las condiciones esenciales para la consolidación de ese hub tiene que ver con la ejecución de infraestructuras pendientes. Básicamente, la conexión con el Corredor Mediterráneo con la construcción del tercer hilo para mercancías entre La Encina y Alicante y su prolongación hasta el Puerto, así como la electrificación de ese último tramo de vías. Ese enlace será clave para que el Puerto de Alicante pueda convertirse en punto de entronque con el centro de la península y con el norte de Europa, según destacó Jesús Aznar, el managing director de Terminales Marítimas del Sureste (TMS), como representante de la gestora de la terminal pública de mercancías.
En esta línea, señaló que la terminal ya está preparada para absorber nuevos tráficos, a la espera de contar con esa conexión ferroviaria que permita implantar la intermodalidad en el transporte. "Tenemos capacidad para acoger trenes de hasta 750 metros de longitud, pero estamos condicionados por esa limitación con trenes de 500 metros que persiste entre La Encina y Alicante", indicó. En el momento en el que se pueda contar ese enlace, según indicó, Alicante se convertirá en la "entrada natural de mercancías con Argelia". De hecho, señaló que ya se están registrando "peticiones de operadores europeos que pretenden venir en trenes, cargando camiones dentro del tren". Es más, señaló que TMS ya dispone de ese sistema, hasta el punto de que cuenta con "un convoy de demostración, posiblemente, uno de los primeros en España, que permite meter camiones enteros dentro del tren, lo que supone un comercio más ágil con el norte de Europa". Así, se mostró convencido de que el Corredor permitirá convertir a Alicante en ese hub real con Argelia.

- Un momento de la mesa redonda sobre el transporte y la logística entre Alicante y Argelia. -
Tanto es así que ya se están manteniendo negociaciones para acoger tráfico de contenedores, como los que pueden llegar de China hasta los puertos de Algeciras o de València, para que puedan redirigirse hasta Alicante, y desde Alicante hasta Orán, "con el fin de evitar congestiones" en esos dos puertos que hacen que el transporte se retrase, según explicó. Así, apuntó que ya se habrían establecido contactos con la naviera Maersk para captar esos tráficos entre Argelia a Alicante como alternativa "más ágil, que reduce tiempos". En este sentido, señaló que la terminal tiene un calado de 14 metros que permite el atraque de buques de gran tamaño, y que la puesta en marcha de la terminal de mercancías privada de Hub Portuario de Alicante, habría liberado espacio para la llegada de más barcos en la terminal pública, por lo que estaría bien dimensionada para absorber esos nuevos tráficos.
También en pasajeros
Por parte del sector de los consignatarios, fue José Andrés Martínez, responsable de Romeu&Cía, quien también remarcó las posibilidades de Alicante para configurar ese hub con Argelia, tras desgranar la evolución del tráfico de pasajeros y de mercancías ro-ro que se habría intensificado desde el pasado septiembre con la incorporación de una seguna línea que presta el servicio de pasaje y de mercancías con Argel y Orán, a cargo de la compañía Nouris Elbahr Ferries, que se suma a la naviera estatal argelina Algerie Ferries.
En esta línea, detalló que, desde 2020, las conexiones entre Alicante y Argelia habrían desplazado más de 4 millones de pasajeros en ambos sentidos, y más de un millón de vehículos, lo que supone una media anual de 180.000 pasajeros y 5.000 vehículos. Y destacó que, al margen del tráfico asociado al periodo vacacional, y al desarrollo de la Operación Paso del Estrecho (OP), buena parte de esos pasajeros llegan a Alicante para hacer negocio. Además recalcó que, desde el mes de septiembre se puso en marcha ese nuevo servicio de mercancías rodadas (vehículos y camiones) a cargo de Nouris, lo que supondría un nuevo flujo de negocio a compatibilizar con la exportación de "textil, calzado, turrón" y con la importación de "pescado y dátil", según apuntó. Y recalcó que cada barco supone que se genere un volumen de negocio de cerca de 2 millones, con un impacto que se multiplica por 204 por el conjunto de conexiones que se registran al cabo del año. De ahí que subrayase la importancia de constituir ese hub con Argelia también en el pasaje y en transporte de mercancía rodada, al margen de que "también estemos haciendo un esfuerzo para que vuelva el tráfico de contenedores".
Por ello, tras subrayar el volumen de viajeros (que se mantiene a pesar de la puesta en marcha de una conexión aérea entre Alicante y Argel), reivindicó la posibilidad de que se implantase un servicio de lanzadera que permitiese facilitar los desplazamientos desde el casco urbano hasta la terminal, ahora situada en el muelle 23, toda vez que también se habría comenzado a detectar un flujo de pasajeros desplazados a Alicante para hacer turismo. En esta línea, lo cierto es que la Autoridad Portuaria ya estaría barajando esa opción, hasta el punto de poner en marcha una primera experiencia piloto este mismo viernes, según precisó el jefe del departamento de Desarrollo de Negocio y Estrategia Empresarial, David José Nadal, que ejerció como moderador de la mesa redonda.
La evolución de las cifras
En cuanto al balance de las exportaciones, fue Góngora quien aportó una radiografía de su evolución en la última década. Así, apuntó que en 2015, España exportó productos por valor de 3.273 millones de euros hacia Argelia, con especial protagonismo de materiales de fundición, hierro y acero. En 2019, se pasó a 2.906 millones que se redujeron en torno a los 2.000 con la pandemia. En 2022, con motivo de la crisis diplomática, las exportaciones cayeron un 46% y aumentó un 50% la compra de gas argelino. En 2023, las exportaciones se quedaron en los 337 milones.
Ya en 2024, tras el restablecimiento de relaciones entre los dos países, comenzó a percibirse la recuperacíon con productos exportados por 584 millones, según precisó. Y hasta febrero de este año, se habría exportado por valor de 190 millones, mientras que las importaciones ascenderían a 417 millones. "Lo hemos pasado mal", señaló, en alusión a la crisis diplomática. Con todo, apuntó que "en Francia está sucediendo ahora algo parecido, por lo que debemos sacar pecho y captar productos a otros países, para convertirnos en su puerto de salida", aseguró.