ALICANTE. El Ministerio de Cultura vuelve a toparse con el filtro administrativo de la Concejalía de Urbanismo de Alicante a la hora de promover la remodelación integral de la Biblioteca Azorín, de titularidad estatal. El departamento municipal ha emitido ya informe técnico sobre la última propuesta presentada por el gabinete que coordina Ernest Urtasun, pero continúa sin conceder la licencia de obra a la espera de que se complete información adicional y de que se recaben informes externos, según precisan fuentes consultadas a consulta de Alicante Plaza.
El alcance de esos estudios pendientes de presentación se desconoce, pero sí resultan evidentes sus consecuencias: la persistencia en el bloqueo a la ejecución de unas obras que se anunciaron por primera vez hace 17 años. Cultura actualizó el proyecto a mediados de 2024 y renovó su solicitud de licencia con la confianza en poder llevar a término la reforma pendiente, que ha llegado a quedar reflejada en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) en los últimos ejercicios como una de las principales actuaciones del Gobierno central en la ciudad con la consignación económica necesaria para promover su inicio. No obstante, el permiso sigue bloqueado, a la espera de que vuelva a subsanarse la falta de documentación observada ahora.
De hecho, la edil de Urbanismo, Rocío Gómez, apuntó en el transcurso del pleno ordinario correspondiente al mes de marzo, en respuesta a una pregunta formulada por Compromís, que el retraso en la tramitación del expediente de concesión de ese permiso se debía, en parte, al posible desconocimiento del ministerio respecto a la ordenanza municipal de licencias urbanísticas y los requisitos exigidos para evaluar las solicitudes. Esa situación se habría reproducido ahora, una vez evacuado el informe técnico municipal que no se había completado hace un mes, lo que habría motivado la solicitud de información complementaria.
Lo cierto es que no es una situación inhabitual. El departamento de Urbanismo suele requerir una media de entre tres y cuatro trámites de subsanación a los proyectos públicos y privados que revisten cierta envergadura, tras constatar que no aportan la documentación necesaria para que pueda evaluarse en su integridad a la hora de conceder su licencia. Se trata de un procedimiento que conlleva meses de retraso en la tramitación de los expedientes, con la consiguiente demora en la ejecución de las obras planteadas.
La lista de proyectos o de iniciativas sujetas a esos contratiempos incluye proyectos como la segunda fase del Plantío Golf Resort, con otros 147 apartamentos, o el de la instalación de la planta de almacenaje de combustibles que promueve XC Business en la terminal de mercancías del Puerto, sobre la que ahora sigue analizándose la concesión de licencia de obra, una vez que se le haya otorgado la licencia ambiental por imperativo legal, justo cuando vencía el plazo máximo para acatar la sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJCV) que le reconoce el derecho a su concesión, precisamente, por silencio administrativo positivo (la falta de respuesta de la administración en los plazos debidos).
En otros casos, es la propia concejalía la que no acaba de completar trabajos internos previos, como sucede con la solicitud de licencia para transformar el antiguo cine Ideal en un hotel. La resolución de esa petición, cursada a finales de 2019, seguiría a la espera de que se reformule el catálogo de protecciones (aprobado de forma provisional en 2020) con la incorporación de las modificaciones señaladas por varios departamentos autonómicos. Entre ellos, el de la Conselleria de Cultura, que instó a ampliar la ficha correspondiente al inmueble de la avenida de la Constitución para incorporar la protección de su configuración interna, así como varios de sus elementos compositivos. La Concejalía de Urbanismo había contratado una consultoría externa para ajustar el catálogo al conjunto de requerimientos formulados, pero nada ha trascendido hasta ahora sobre sus resultados. De hecho, el grupo municipal de Esquerra Unida Podem ha registrado una pregunta específica al pleno ordinario del mes de abril, este jueves, sobre la adaptación de la ficha del antiguo cine, al tener la impresión de que podría haberse obviado el requerimiento de la conselleria.
Dos años para ejecutar la renovación
En todo caso, fuentes municipales indicaron que la pretensión del equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), sería desbloquear en cuanto sea posible la realización de la remodelación de la Biblioteca Azorín con el propósito de que pueda mejorar su servicio actual. Como informó este diario, el proyecto comprende una renovación completa del edificio, construido en 1976, para renovar sus condiciones arquitectónicas externas, ante el deterioro al que se encuentra expuesto por su cercanía al mar, en segunda línea del paseo marítimo del Postiguet.
Así, comprende la sustitución de parte de los materiales que conforman su fachada y la instalación de un doble acristalamiento para mejorar su aislamiento térmico y amortiguar la incidencia de la luz solar mediante un tratamiento especial. Además, también se prevé la incorporación de medidas enfocadas en la eficiencia energética, así como la instalación de paneles solares en su cubierta. Por último, se pretende mejorar la distribución interna de sus salas y adaptar el edificio a las condiciones de accesibilidad y sostenibilidad exigidas en la normativa actual. El conjunto de la intervención propuesta superaría los 16,8 millones y se prolongaría durante un plazo de dos años, a partir de la fecha de concesión de la licencia de obra.