ALICANTE. Los cerca de 14 años de espera para que la ampliación del Centro 14 de Alicante vea la luz no defraudarán. Al menos, en lo que respecta a las posibilidades que ofrece en cuanto al uso de sus espacios. Lo cierto es que su extensión sobre el inmueble anexo permite que el Ayuntamiento cuente con un gran contenedor, que dispondría de tanta o más superficie que el edificio del antiguo Hotel Palas. Así lo aseguró el edil de Vivienda y Juventud, Carlos de Juan, este jueves, en el transcurso del pleno ordinario de octubre, en respuesta a la declaración institucional registrada por Compromís, en la que la coalición valencianista reivindicaba que se garantizase el uso del inmueble para albergar las actividades destinadas a los jóvenes.
La propuesta política quedó rechazada. Pero el objetivo pretendido estaría asegurado, según recalcó De Juan. Primero, porque el inmueble del número 14 de la calle Labradores, en el Casco Antiguo, albergará tanto la sede institucional de la Concejalía de Juventud, como las dependencias del Consejo de la Juventud. Y segundo, porque también acogerá el desarrollo de toda la programación de ese departamento municipal, al margen de que ese uso se compatibilice con las oficinas de otras concejalías o servicios que ahora se encuentran distribuidas en el antiguo Palas, como anticipó este diario.
El equipo de gobierno, del Partido Popular (PP), ultima ahora la organización de la mayor parte de esos departamentos, después de que la Cámara de Comercio haya acordado recuperar el uso del inmueble de la plaza de la Puerta del Mar para poder resituar su propia sede institucional. Se trata de un movimiento que debe producirse antes de fin de año, en función del plazo establecido por el nuevo propietario del edificio de la Plaza de Ruperto Chapí en la que se encuentran sus oficinas en la actualidad.Todo, en un contexto en el que la entidad cameral no puede hacer uso de sus nuevas dependencias en el centro de negocios Panoramis Life & Business, a la espera de que se resuelve el expediente sobre su licencia.
A priori, todo parece indicar que la ampliación del Centro 14 acogerá a la mayor parte de los funcionarios de las áreas de Turismo, Comercio, Recursos Humanos y Medio Ambiente ahora instalados en el Palas. Pero, además, contará con aulas de formación, una sala de ensayos de 120 metros cuadrados, otra sala de exposiciones de más de 150 metros cuadrados, y un salón de actos a modo de auditorio con un aforo de 240 personas y una superficie de 250 metros cuadrados, según la información anticipada por De Juan hasta ahora.
Eso sí, la fecha de la apertura al público del edificio continúa sin desvelarse, una vez certificada la finalización de las obras. Fuentes consultadas indicaron que todavía se estaría cerrando la tramitación administrativa de la inscripción registral del nuevo edificio resultante, toda vez que pasaría a tratarse de un único inmueble que se distribuía sobre dos fincas distintas. Además, su estreno oficial también quedaría pendiente de la emisión de los últimos informes en materia de seguridad y prevención de riesgos. Y su entrada en funcionamiento se habría visto condicionada ahora por la necesidad de albergar los servicios desplazados desde el Palas, que también se repartirán en dependencias todavía disponibles del edificio que acoge la Casa de la Festa, en la avenida de la Rambla.
Del Plan Racha a la actualidad
Las obras de ampliación del Centro 14 se iniciaron en 2011, como desarrollo de una de las principales actuaciones contempladas en el Plan de Rehabilitación del Casco Histórico de Alicante, conocido como el Plan Racha. No obstante, como ha venido informando este diario, los primeros problemas comenzaron a registrarse solo un año después de su inicio, cuando los trabajos quedaron paralizados como consecuencia de las dificultades económicas en las que se vio inmersa la constructora adjudicataria de su realización.

- La fachada del edificio del Centro 14, en la calle Labradores de Alicante.
En ese momento, la Generalitat, bajo el mandato del Partido Popular (PP), concertó la continuidad de las obras con una segunda compañía. Pero el avance del proyecto acabó truncándose en 2016, como consecuencia de las desavenencias declaradas entre la constructora y la dirección facultativa de las obras en cuanto a las condiciones de ejecución. Esa situación de bloqueo se mantuvo hasta que, en 2022, el departamento autonómico de Vivienda -entonces coordinado por el exconseller Rubén Martínez Dalmau- consiguió rescindir ese segundo contrato. Después, concertó un acuerdo por el que se cedía las competencias para concluir las obras pendientes al Ayuntamiento de Alicante, a través del Patronato de Vivienda. Dicho acuerdo permitió que los trabajos se readjudicasen por tercera vez en favor de Orthem, por un presupuesto de más de 2,7 millones (2.778.921,60 euros, impuestos incluidos).
En principio, se había estipulado que la terminación de los trabajos pendientes debía producirse en febrero de 2024. Sin embargo, a partir de entonces se concedieron distintas prórrogas hasta que la actuación se dio por concluida a finales de ese mismo año. Con todo, la provisión de un centro de transformación, y su conexión eléctrica, acabó propiciando el retraso de su finalización hasta el pasado verano. Ahora, ya se habría incorporado incluso la mayor parte de su mobiliario.