ALICANTE. El equipo de Gobierno del PP en el Ayuntamiento de Alicante da el primer paso para actualizar la Ordenanza Municipal de Protección Acústica, conocida como la ordenanza del ruido. La propuesta de revisión, aprobada en la Junta de Gobierno de este martes, adapta la norma en vigor, de 1991, para ajustarla a los nuevos parámetros legales previstos en la regulación autonómica y estatal promulgada desde entonces y, además, se amplía para recoger otro tipo de situaciones de exposición al ruido generadas como consecuencia de los cambios sociales: situaciones como la proliferación de las terrazas de los establecimientos hosteleros o de fenómenos como el tardeo, por ejemplo.
En concreto, entre las nuevas medidas contempladas figura la exigencia de un estudio acústico para todos los locales hosteleros, tanto sobre el nivel de emisiones sonoras generado en el interior, como en el exterior, en el caso de que dispongan de velador. Ese estudio será obligatorio para las nuevas aperturas y tendrán que aportarlo los que ya estén funcionamiento en el momento en el que corresponda renovar sus correspondientes permisos.
Al mismo tiempo, también se reduce el nivel de emisiones máximo que se debe registrar en los dormitorios de las viviendas: desde los 30 decibelios se rebaja a 25. Según ha explicado la edil de Urbanismo, la popular Mari Carmen de España, se trata de una propuesta formulada por la propia Policía Local y por los vecinos, durante el periodo establecido para que se presentasen aportaciones a la ordenanza. De España ha detallado que, en ese proceso, se han registrado hasta 27 propuestas que se habrían incorporado de manera mayoritaria.
Al margen de esas nuevas situaciones, a grandes rasgos, el nuevo texto -que se prevé someter a la consideración del pleno en la sesión ordinaria de este mes o en la del próximo mes de abril- incorpora más supuestos de posibles infracciones no contempladas hasta ahora; las clasifica en leves, graves y muy graves (en la ordenanza actual sólo se contemplaban las leves y las graves); especifica cuáles encajarían en cada uno de esos niveles y; por último, aumenta los importes de las sanciones previstas. Así, las sanciones leves llegarán hasta los 600 euros y las graves oscilarán entre los 601 y los 12.000 euros. Sobre las muy graves, será la Generalitat quien resuelva al tratarse de la administración competente.
Entre el resto de novedades, De España se ha referido al fin de la exención general que se aplicaba en relación a los niveles del ruido durante la celebración de las fiestas, incluidas les Fogueres. En esta línea, ha detallado que "en la nueva ordenanza se ha puesto un límite de 90 decibelios, y en las mascletàs se ha graduado el tiempo máximo de duración en los siete minutos", la duración prevista en el concurso oficial.
Con respecto al tardeo, la edil ha precisado que se ha incorporado "en el artículo 34 de la ordenanza que se refiere a los locales al aire libre y al tema de las terrazas" la ya citada exigencia de "un estudio acústico que debe reflejar tanto el interior como el exterior en terraza". Además, ha detallado que los promotores de "cualquier actividad en el exterior de la vía pública que lleve consigo una alteración del ruido, como pueden ser las despedidas de soltero que lleven una charanga, será sancionados si no han pedido autorización".
De España se ha referido a las críticas vertidas hasta ahora por los grupos de la oposición, sobre el retraso en la redacción de la ordenanza a la que se dio inicio de manera oficial el pasado octubre, para señalar que el trabajo realizado "ha sido arduo, y ha conllevado un exhaustivo estudio y la colaboración con los vecinos y las áreas municipales, y se ha trabajado para hacer una ordenanza que se mantenga en el tiempo, y la pueda utilizar cualquier gobierno" en lo sucesivo.
Según han precisado fuentes municipales en un comunicado posterior, la ordenanza tiene su origen en los proyectos anteriores, pero nace con vocación transversal, por lo que "se han tenido en cuenta para su redacción tanto las aportaciones de los vecinos como de los servicios municipales que tienen competencias sobre la materia".
Por lo que respecta a las propuestas que reclamaban la posibilidad de que se acordase la declaración de Zonas Acústicas Saturadas (ZAS) en determinadas áreas, De España ha precisado que "teniendo en cuenta las limitaciones competenciales del Ayuntamiento, y la correcta técnica en la redacción de disposiciones generales, no se prevé en la Ordenanza el trámite de las ZAS, puesto que su regulación es pormenorizada en la legislación autonómica" que queda incorporada como anexo a la ordenanza.
La propuesta ha motivado la reacción de la portavoz municipal del PSOE y exconcejal de Urbanismo, Eva Montesinos. La regidora ha abundado en el retraso de casi un año en dar el siguiente paso para la elaboración de la ordenanza pese a que, bajo su etapa al frente de la concejalía, se había elaborado un borrador que el PP ya tenía sobre la mesa. A su juicio, se tenía que haber dado una respuesta rápida para un problema que requiere de soluciones cuanto antes. Así, ha expresado su confianza en que la propuesta pueda ser debatida en el pleno cuanto antes para que quede aprobada este mandato.
También ha valorado la propuesta la portavoz municipal de Ciudadanos (Cs), Yaneth Giraldo, quien ha señalado que "la edil de Urbanismo ha tenido un año para llevar la ordenanza a la Junta de Gobierno Local". "De las cuatro tareas importantes que tenía pendiente ha optado por la más sencilla, que estaba además prácticamente redactada, ha abundado.
Así, ha apuntado que "se podía haber trabajado en todos estos meses en el Catálogo de Protecciones, en las revisiones del Plan del Casco Antiguo y del Centro Tradicional que se aprobaron en pleno el pasado mes de agosto".