Pedro Alemany en una imagen de archivo. Foto: PEPE OLIVARES. LA VILA JOIOSA. El concejal de Gent per La Vila (GPV), Pedro Alemany, salió al paso este lunes de la polémica en la que se ha visto envuelto por su postura ante la decisión de dejar solo como nombre oficial 'la Vila Joiosa', y por tanto, eliminar su topónimo en castellano, como así propone Compromís. Una posición que no es cualquiera, ya que ambos grupos forman parte del tripartito que gobierna en la localidad. Tanto Alemany como el alcalde, Andreu Verdú, restaron importancia a las discrepancias en el seno del tripartito a cuenta de esta moción.
Según explicó el edil, quería presentar una enmienda a la propuesta de la coalición valencianista, pero para su sorpresa, retiraron la moción en el pleno antes de que se debatiera, como ya contara este diario.
Tal y como relatan ambos en la cronología de los hechos, dos días antes del pleno, durante una reunión del gobierno local expusieron la moción del informe que justifica el uso exclusivo de la Vila Joiosa. Ante esto, el concejal de GPV tomó la palabra para mostrar su posición explicando que presentaría una enmienda en el pleno.
Durante la rueda de prensa, el edil no quiso detallar de qué tenor era. Pero como ya contara a Alicante Plaza el concejal de Compromís, Josep Castiñeira, en la reunión se mostró en contra del procedimiento y la idea principal de la moción. Cabe recordar además que hace tres años se presentó esta misma moción, y Alemany votó en contra.
Por ese motivo, la formación valencianista decidió retirar la moción y esperar a que se aclarara la situación, también con las dos entidades que están dando indicaciones contrarias. La Secretaría de Estado de Administraciones Públicas pedía que se acompañara la petición con un informe que lo justifique, mientras que la Academia Valenciana de la Lengua aseguraba que no era necesario porque el término ya es oficial y además ya existe un informe del 1979 que lo justifica.
Aunque el concejal de Urbanismo no quiso aclarar qué pedía en la enmienda, sí dijo que condicionaba su voto a cómo acababa ésta, si se la aprobaban o no. Según ha podido saber este diario, el regidor pediría que el topónimo en valenciano fuera el primero en consideración, pero que como segunda opción oficial estuviera el nombre en castellano. Algo que no casa con la petición de Compromís.
Y el voto de Alemany es imprescindible para estar en mayoría en este asunto, ya que solo les diferencia un voto frente a la oposición que forman el PP y Cs y que ya se han manifestado en contra de la decisión sobre el nombre de la localidad.
Durante la comparecencia de prensa estaba presente el alcalde, el socialista Andreu Verdú, que ve como sus compañeros se enfrentan de manera pública por una moción del gobierno. Para el primer edil, se trata de una situación "normal" en la democracia porque no "todos pensamos igual". De la misma manera, considera que la postura de todos en este asunto está clara y se ha debatido "suficiente estos días".
Además, señaló que todo el gobierno va a "seguir trabajando por el bien de los ciudadanos de la Vila". Con todo, negó que hubiera "ni ruptura, ni crisis" en el gobierno. Finalmente, opinó que las discrepancias y debates internos deberían quedar en el ámbito privado. Sin embargo, restó importancia a que se haya hecho público.
Hay que tener en cuenta que el concejal de Compromís vertió unas declaraciones en redes sociales en las que arremetía contra el concejal de GPV por su sentido del voto. Preguntado por este asunto, Alemany aseguró que por su parte no había problema con sus compañeros y que cuando se vuelva a llevar a pleno este asunto, continuarán con el debate. "Andreu Verdú sabe que le di mi clara sinceridad de apoyo durante toda la legislatura y aquí estoy, no tiene por qué 'medrar' eso cualquier relación a partir de ahora por este hecho, ni mucho menos", dijo el regidor de Urbanismo.
A continuación, afirmó que son "cosas que pasan en todas las familias y en este tripartito puede pasar eso, o algo más, ¿por qué no?". Además, señaló que "esto ocurre en política" y que "a nivel nacional están pasando iguales o peor y no tiene por qué romperse un pacto o un acuerdo".
Por último, Verdú le quiso dar su apoyo al concejal en otro asunto, que es la investigación por supuestos delitos de prevaricación y falsificación de documento. Éste habría permitido presuntamente un enganche ilegal de una vivienda privada al alumbrado público. El concejal de Urbanismo defendió que había sido un error involuntario.
