ALICANTE. El centro de tecnologías avanzadas de Accenture en Alicante, ubicado en la planta baja de la terminal de cruceros del puerto y bautizado con el nombre del expresidente de la multinacional (recientemente fallecido) Pierre Nanterme, se ha convertido de hecho en el centro más avanzado de la firma en España, donde se investigan las tecnologías más modernas que desarrolla Accenture para aplicarlas a las empresas: inteligencia artificial, blockchain, realidad extendida y computación cuántica.
El centro, que comenzó a operar el pasado 1 de abril, tal como adelantó este diario, se presentaba este miércoles en sociedad con una inauguración oficial a la que asistieron tanto el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, como el alcalde de Alicante, Luis Barcala, así como el presidente de Accenture en España, Juan Pedro Moreno, y la directora de Tecnologías de la multinacional para Iberia, Mercedes Oblanca, así como numerosas personalidades y representantes del ecosistema digital que ha comenzado a florecer en la capital alicantina. La inauguración oficial ha tenido que esperar hasta julio por la celebración de las elecciones, pero Accenture lleva en Alicante desde febrero.
En estos momentos, en este centro ya trabajan cerca de 90 personas, de las que solo 7 proceden de traslados internos de la multinacional. El resto ha sido reclutado en Alicante, directamente por el director del centro (que tuvo la primera toma de contacto con el ecosistema tecnológico de la ciudad en el congreso de Inteligencia Artificial celebrado en noviembre), tanto entre el sector como en las universidades y los centros de Formación Profesional. Ocho alumnos de FP que realizaron prácticas en la empresa ya han pasado a engrosar su plantilla. Al ritmo actual de crecimiento, es probable que Accenture alcance el máximo de capacidad del centro, fijado en 300 personas, en el plazo de un año. Lo que supone un problema, puesto que la intención es llegar a 1.000 personas en Alicante.
Así las cosas, la multinacional ya tiene claro que en breve va a tener que buscar un nuevo emplazamiento para seguir creciendo, y de hecho ya ha comenzado a estudiar opciones. En este sentido, el nuevo edificio del Distrito Digital en el muelle 5, que sería una opción a barajar, está previsto para finales de 2020, con lo que podría no llegar a tiempo. Además de que su capacidad prevista es de 550 personas, con lo que la firma volvería a encontrarse con los mismos problemas para seguir creciendo. "Ya estamos buscando emplazamientos", explican. Porque al ritmo actual, esas 300 personas se alcanzarán a mediados de 2020.
Como centro de tecnologías avanzadas, en la sede de Accenture en Alicante se investiga y desarrolla software de las cuatro ramas más punteras que existen en estos momentos: el Blockchain (Distributed Ledger), la IA (Artificial Intelligence), la Realidad Extendida (Extended Reality) y la computación cuántica (Quantum Computing). Un conjunto que se conoce como DARQ por sus siglas en inglés, y que en estos momentos supone el 40% del volumen de negocio de la compañía tanto en España (donde factura 1.000 millones) como en el mundo (cerca de 40.000 millones de dólares). Está previsto que en cuatro años llegue a suponer el 60% de los ingresos, según Oblanca.
El blockchain, que permite la organización de procesos sin una autoridad central, se está aplicando ya para ofrecer servicios sanitarios a los refugiados. La computación cuántica, la menos desarrollada de las cuatro tecnologías pero que "puede suponer una revolución", permitirá realizar cálculos de un billón de años en dos minutos, y ya ha encontrado aplicación en la industria farmacéutica. La IA se está utilizando para tomar decisiones en tiempo real sobre la organización del trabajo en la industria. Y la realidad extendida (que permite interactuar con el entorno virtual que genera) se aplica sobre todo a formación, también en sectores poco tecnológicos como el hotelero. De hecho, la tecnología desarrollada por Accenture se está utilizando para formar a camareras de piso de la cadena Meliá.
Juan Pedro Moreno, que realizó la presentación del centro, consideró que era "un imperativo del negocio" estar en Alicante, que presenta unas características idóneas para la multinacional (con centros en Madrid, Barcelona, Bilbao, Málaga y Sevilla): conexiones con Europa a costes competitivos, fundamental para los clientes de Accenture en dichos países, y universidades y centros de FP "alineados con el talento que necesitamos". La empresa ya tiene un acuerdo con la UMH de Elche, y en breve lo firmará con la UA. Asimismo, ha cerrado convenios con cinco centros de FP, donde ha formado a 25 maestros y desde donde ha incorporado ya a ocho personas a su plantilla.
El presidente de Accenture consideró que el aterrizaje de su empresa contribuirá a dinamizar el ecosistema alicantino y su tejido empresarial, tanto por el acceso a sus desarrollos como por la implantación de proveedores y competidores de la firma. "El Distrito Digital tiene garantizado que vamos a trabajar mano a mano para desarrollarlo. No es tan descabellado pensar que Alicante pueda ser en el futuro el Silicon Valley del Mediterráneo". A su juicio, la iniciativa de la Generalitat para impulsar el citado ecosistema digital "ya es un éxito a pesar del poco tiempo con que cuenta".