ALICANTE. El Hércules sigue esperando que la Agencia Tributaria se pronuncie sobre su última propuesta para regularizar su situación respecto la deuda de 4,3 millones de euros que mantiene con ella.
Este jueves se cumple una semana desde que el club remitió al fisco la que Juan Carlos Ramírez calificaba como "última oferta", condicionando su continuidad en el club a que sea aceptada: "Dimitiré y dejaré la documentación preparada para solicitar en el juzgado la liquidación voluntaria" señalaba el empresario vasco en su comparecencia de prensa del pasado viernes.
La propuesta de pago es sensiblemente superior a las formuladas anteriormente, toda vez que plantea el pago inmediato de dos millones de euros, casi la mitad de la deuda, mientras que se ofrecen garantías reales para respaldar el pago fraccionado de la otra mitad de acuerdo con los condicionantes que se cierren con el fisco en cuanto al importe de las cuotas y que, básicamente, se vinculan a la categoría en que milite el equipo.
Qué bienes inmuebles ofrece el Ramírez
Respecto a las citadas garantías reales, cuyo ofrecimiento no es una novedad, Ramírez ya las planteaba en la anterior propuesta que fue rechazada en tan solo 24 horas, Alicante Plaza ha podido saber que ni antes ni ahora se han concretado.
Esto es, se va a esperar a saber si la Agencia Tributaria cambia de criterio y acepta ese tipo de garantías para trasladarle de qué inmuebles se trata, adjuntando nota simple y tasación.
Ramírez insiste en que no le conceden un aval bancario de 4,3 millones
Pese a que el Hércules cerró con los técnicos del fisco un nuevo convenio en el que se contemplaba la variable de la Segunda División B y el pago de una cuota mensual menor que la fijada en 2013 mientras militase en dicha categoría, no se le exigía que aportase ningún tipo de garantías que respaldasen el nuevo fraccionamiento al que se accedía. Sin embargo, la directora general de Recaudación, Soledad García que es la única competente para cerrar el acuerdo pasó a reclamar en febrero un aval bancario por el importe total de la deuda, 4,3 millones de euros, si se deseaba fraccionar de nuevo el pago de la misma.
Juan Carlos Ramírez que resaltaba el pasado viernes que su esfuerzo no puede ser mayor, iba más allá el lunes al apuntar que no hay ningún banco que le conceda un aval de 4,3 millones de euros.