ALICANTE. Nueva propuesta en trámite para tratar de conciliar la actividad hostelera con el descanso de los vecinos en las principales calles del Centro Tradicional. El equipo de Gobierno compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs) trabaja ya en un borrador para un nuevo plan de ordenación de veladores de la calle Castaños y adyacentes en el que se revisa los porcentajes de ocupación de los locales con el fin de ajustarlos a los parámetros de la ordenanza municipal y a los que puedan figurar en la legislación urbanística. En esencia, se trataría de los que afecten a la determinación de pasillos mínimos para el tránsito peatonal y para las necesidades de acceso de los servicios de emergencia (policía, bomberos, ambulancias, etc.).
Hasta el momento, eso sí, no ha trascendido si esa revisión conllevará una posible reducción en los veladores concedidos. Entre otros motivos, porque todavía se estarían incorporando algunos locales que no se habían tenido en cuenta, sobre los que se debe analizar de qué tipo de licencia disponen y si cuentan con permiso para la instalación de velador.
Sea como fuere, fuentes municipales precisaron que esa reordenación, en manos de los técnicos de la Concejalía de Ocupación de la Vía Pública que dirige Manuel Jiménez, plantea varias alternativas para la redistribución del mobiliario vinculado a las terrazas (mesas y sillas, pero también estufas y sombrillas), tanto en la franja central de las calles peatonales, como junto a las fachadas de los edificios, de modo que se plantearán a hosteleros y residentes -en un encuentro que podría celebrarse la próxima semana- con el propósito de consensuar la solución que se considere más efectiva.
En esa reordenación, según las mismas fuentes, se contempla igualmente una revisión en el régimen de horarios previstos para la retirada de veladores, de modo que pueda mantenerse la actividad económica sin causar perjuicio a los vecinos del entorno.
La propuesta de reordenación de Castaños llegaría después del ajuste ya aplicado para la plaza de Gabriel Miró, por el que se acordó desplazar los veladores hacia las aceras laterales, dejando libre el espacio central de la plaza, después de que se conociese un informe que alertaba sobre el riesgo de desprendimiento de ramas de los ficus de la plaza.
La de Castaños continúa siendo la reestructuración pendiente después de que el entonces concejal de Urbanismo y Ocupación de Vía Pública, Miguel Ángel Pavón, lanzase una primera propuesta que no llegó a aplicarse poco antes de que se rompiese el pacto de gobierno del extinto tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís). En aquel momento, se planteaba reubicar los veladores junto a las fachadas de los edificios para dejar libre el espacio central de la calle, lo que conllevaba una reducción de la superficie autorizada de casi un 39%, al pasarse de los 905 metros cuadrados ocupados por veladores de 35 locales contabilizados entonces.
Con esa regulación, como sucede con la que impulsa el bipartito ahora, se pretendía racionalizar el uso del espacio público y minimizar molestias por ruido a los residentes del entorno, que ya entonces venían revindicando la declaración de Zona Acústica Saturada (ZAS) para el entorno de Castaños. Como informó este diario, esa reivindicación ha derivado en el contencioso por vulneración de derechos fundamentales que se dirime en el juzgado de lo Contencioso número 4, pendiente de que se celebre una segunda sesión para que se exponga el contenido del informe pericial encargado a un profesional independiente, a petición de los demandantes: la Asociación de Vecinos del Centro Tradicional. Dicho informe fue facilitado a los abogados del Ayuntamiento y colectivo vecinal) el lunes. Las dos partes podrán formular alegaciones a su contenido y exponer sus conclusiones cuando se celebre la próxima vista.