ALICANTE. El proceso de liquidación de la mercantil que venía explotando el parking de Poniente en el puerto de Alicante, Procoypro, ha disparado el interés de diversos inversores interesados en asumir la gestión del activo. Algunos de estos inversores, según ha podido saber Alicante Plaza, ya se han puesto en contacto con el administrador concursal, el abogado ilicitano Fernando Martínez, para interesarse por el proceso de liquidación.
Según han confirmado a este diario fuentes de la Autoridad Portuaria de Alicante, el procedimiento que se seguirá con el parking de Poniente es similar al que aún se está llevando a cabo con el centro comercial Panoramis. Es decir, dentro del plan de liquidación de la mercantil que tenía la concesión, el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Alicante, que es donde se instruye el concurso, sacará a subasta dicha concesión. Lo que aún no está definido son las condiciones que deberán reunir las ofertas que se presenten, pero en cualquier caso deberían asumir la deuda de la empresa en liquidación con el puerto, y garantizar la viabilidad de la concesión.
En principio la concesión actual expira en 2020, por lo que en cualquier caso la Autoridad Portuaria tendría que volver a sacarla a concurso, como sucedió sin ir más lejos con el centro de negocios anexo al parking, hoy convertido en el Business World Alicante tras la quiebra del anterior adjudicatario. En este caso el puerto rescató la concesión y la volvió a sacar a concurso, pero en la liquidación de Procoypro todo indica que el proceso se resolverá con una subasta judicial, al igual que en el Panoramis. Fuentes de la Autoridad Portuaria señalan que su interés es que el servicio de parking se siga prestando, sin tener que asumirlo directamente. Así, esperan que el interés de los citados inversores se concrete en la fase de subasta, para lo cual podría contemplarse una ampliación del plazo de la concesión que la haga rentable, si media una inversión productiva.
Como ha contado este diario, Procoypro se adjudicó en 2002, con Mario Flores como presidente del puerto, la concesión para construir y explotar el aparcamiento, que en aquel momento florecía al calor del centro comercial. En 2010, el puerto renovó la concesión por otros diez años, de forma que expira en 2020. No obstante, la caída del negocio (arrastrado precisamente por los problemas de Panoramis) y la acumulación de deudas, sobre todo con entidades financieras, abocaron a la concesionaria, domiciliada en Elche, a solicitar un preconcurso y abrir una fase de refinanciación. Al fracasar ésta, el pasado mes de enero Procoypro solicitó el concurso voluntario y, directamente, la apertura de la fase de liquidación.
Por el momento, la empresa en liquidación sigue prestando el servicio del aparcamiento. Si hace unos meses, como desveló este diario, los empleados cobraban en metálico a los usuarios, ahora ha vuelto a admitirse el pago con tarjeta de crédito. En paralelo, Hacienda ha comenzado a remitir escritos a los grandes clientes de la infraestructura (empresas portuarias que reservan varias plazas y pagan abonos mensuales de cierta envergadura) para que ingresen directamente en su cuenta el importe, dadas las deudas de la concursada con el fisco.