ALICANTE. No habrá readjudicación del servicio de mantenimiento de zonas verdes de Alicante. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) cierra la puerta a esa posibilidad a través de un auto emitido este jueves por el que decreta la "imposibilidad material y legal" de ejecutar la sentencia dictada en julio de 2022 sobre la licitación del contrato por la que se anulaba la licitación y se conminaba a retrotraer el procedimiento al momento anterior a la exclusión de la empresa recurrente, Geamur, para que fuera admitida su oferta en el concurso.
El TSJ destaca que el pasado 10 de enero, el Ayuntamiento de Alicante presentó un escrito en el que ponía de manifiesto la imposibilidad material de ejecutar la sentencia. Y esa es la posición que se reconoce ahora -en un auto con fecha de 28 de mayo al que ha tenido acceso este diario- en el que se pone de manifiesto que "el contrato objeto de las presentes actuaciones se formalizó el 1 de septiembre de 2020 por tres años que terminaron el 31 de diciembre de 2023; por tanto, se ha extinguido y no es posible la ejecución de la sentencia".
En este sentido, los magistrados de la sala quinta de la Sección de lo Contencioso Administrativo del TSJ apuntan que "el contrato con sus prórrogas se ha extinguido y no cabe la ejecución singular fijada en la sentencia de anular la licitación y retrotraer las actuaciones; por tanto, concluimos que existe imposibilidad material y legal de retrotraer unas actuaciones que ya no existen".
¿Qué solución se plantea como fórmula alternativa de resarcir el derecho de Geamur a ser readmitida en el proceso de licitación? El establecimiento de una compensación económica. Para ello, acuerda abrir el correspondiente incidente de indemnización y concede 20 días de plazo a Geamur para que presente reclamación "si a su derecho conviene". A partir de ahí, será el alto tribunal quien dé traslado de la posición de la empresa al Ayuntamiento para que formule su propia propuesta. Y, una vez atendidas las dos partes, será el propio tribunal el que concrete el importe de la compensación económica definitiva.
Por lo pronto, lo cierto es que las posiciones sobre la cuantía de esa compensación por parte de Geamur y del Ayuntamiento seguirían alejadas, como se puso de manifiesto en el proceso de negociación concertado entre ambas partes, con el propósito de alcanzar un acuerdo extrajudicial alternativo a la ejecución de sentencia. De ahí que, finalmente, la empresa diese por concluido ese proceso de diálogo e instase al TSJ a ejecutar la sentencia de 2022, tras sostener que no se había producido ningún planteamiento viable en tiempo y forma.
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Todo, a pesar de que el equipo de gobierno señaló, entonces, que se pretendía trasladar a la compañía una nueva propuesta económica por un importe superior al planteado inicialmente, después de que los técnicos municipales hubiese elaborado un nuevo cálculo al respecto.
En todo caso, la resolución del TSJ conocida este jueves no es definitiva, ya que cabe la interposición de recurso de reposición a presentar en un plazo de cinco días desde su notificación. Sea como fuere, el vicealcalde y edil de Contratación y Medio Ambiente, Manuel Villar, ha expresado este mismo jueves, la satisfacción del equipo de gobierno respecto a la decisión del TSJ.
"Estamos satisfechos porque el auto del TSJ coincide plenamente con la tesis del Ayuntamiento sobre la inejecutabilidad de la sentencia", ha destacado. "Con esta resolución se confirma que no será necesario retrotraer todo el procedimiento y que podremos seguir prestando en las actuales circunstancias el servicio de mantenimiento de nuestros parques y jardines", ha añadido.