ELCHE. La ilicitana Simplicity Works, conocida por introducir el sistema bonding cell que a nivel tecnológico ya es un proceso disruptivo en el sector del calzado, porque fabrica el zapato 'de una vez' con un molde, evitando otros pasos manuales, trabaja ahora para CamperLab. Se trata de unas sneakers de la compañía mallorquina Camper, y que en este caso están diseñadas por el conocido Achilles Ion Gabriel, director creativo de Camper y CamperLab.
Desde que empezaron su andadura en el Parque Empresarial con su nueva nave, la compañía había llevado con discreción para qué firma habían empezado a fabricar. Se trata de esta línea Tossu by Camperlab de Camper, que buscan un segmento más lujoso. Un zapato 'Made in Spain' que es el primero con el que la firma ilicitana se estrena con su tecnología bonding cell para el mercado. Eso sí, la cantidad de pares que están fabricando la mantienen como confidencial.
"Empezamos a fabricarla en verano", explica Adrián Hernández, CEO de la compañía, quien añade que se trata de un "desarrollo muy complejo porque tiene una geometría muy especial, es un trabajo importante de ingeniería, de diseño de producto". Esa geometría compleja es la del polímero que introducen en su cadena y que une partes del producto a través de un molde. "Luego ya va el proceso de los cordones", añade. Martínez incide además en que con la tecnología que emplean no se utiliza cola, y que todas las materias se reciclan, trabajando para el reciclado con Zahonero y Greene, con quienes llevan tiempo estrechando relaciones en este y otros proyectos de economía circular. Esa facilidad de reciclaje al final de vida del zapato, así como el no uso de adhesivos tradicionales, es uno de los puntos fuertes que destaca el propio Achilles para esta línea de Tossu de las sneakers.
Actualmente su plantilla está formada por 35 trabajadores, y están perfilando la captación de nuevos clientes para el futuro. A priori, en 2023 está planteado ampliar la plantilla, cuestión que estaría directamente vinculada con el almacén inteligente que han encargado. Actualmente utilizan líneas de inyección, carruseles donde se atornillan los moldes y se giran, lo que presenta el problema de que cada vez que se cambie el modelo de zapato, hay que desatornillar y ajustar. Con el almacén inteligente han diseñado unos moldes que son como unas cajas universales que se mueven libremente por el transportador. Un paso que evitaría el proceso de cambiar el molde y el proceso de atornillado, por lo que "pueden entrar directamente al almacén y salir por un elemento automático, según la demanda", señalaba a este medio el CEO.
La actual fábrica se ha financiado con 1,3 millones de euros de fondos europeos cuya recepción se firmó a través del Consejo Europeo de Innovación (EIC), el EIC Accelerator, un programa en el que tan solo han entrado 99 pymes de más de 4.000 candidaturas de toda Europa. Un crédito del que han utilizado una parte y del que podrían absorber, según necesidades, hasta 15 millones de euros.